Historias de los esfuerzos de víctimas de la dioxina para convertirse en útiles trabajadores y sacrificios de activistas y médicos para atender a esas personas desafortunadas, fueron compartidos durante una gala temática celebrada este viernes en Hanoi.

En su intervención, la vicepresidenta de la República, Nguyen Thi Doan, subrayó que aliviar el dolor causado por la Agente Naranja/dioxina no es sólo un acto humanitario sino también el llamado de la conciencia y el deber de cada persona.

Por su parte, el general Nguyen Van Rinh, presidente de la Asociación de Víctimas del Agente Naranja de Vietnam (VAVA), recordó las terribles consecuencias de la guerra química lanzada por Estados Unidos y elogió los aportes de sus compatriotas y extranjeros a la lucha por la justicia de los damnificados por el tóxico.

Los participantes en el evento disfrutaron de interpretaciones artísticas e intercambiaron con el secretario general de la Asociación de Amistad Reino Unido – Vietnam, Len Aldis, y el director de la televisión surcoreana MBC Nanum, Lee Jong Hyun.

Se trata de dos activistas internacionales que han difundido durante años a lectores en todo el mundo informaciones sobre las consecuencias de la dioxina en el hombre y la tierra de Vietnam.

El programa, transmitido en vivo a todo Vietnam, se celebró a cargo de la VAVA y la Revista Comunista y en ocasión del Día de Victimas del Agente Naranja, 10 de agosto.

Con el mismo motivo, la Cruz Roja de este país inició en la provincia norteña de Lang Son el mes por las víctimas de la dioxina, cuyo objetivo es recaudar donaciones valoradas en cinco millones de dólares destinadas a esas personas.

De 1961 a 1971, la aviación norteamericana roció 80 millones de litros de herbicida que contenían 400 kilogramos de dioxina o también conocida como Agente Naranja, uno de los componentes químicos más tóxicos conocidos por el hombre.

Casi cuatro décadas después de la guerra, Vietnam sufre aún graves daños, con millones de víctimas y millones de hectáreas de bosque contaminadas.

Se trata de la guerra química de mayor envergadura y larga que provocó las consecuencias más destructivas en la historia de la humanidad.

Las víctimas vietnamitas continúan reclamando por indemnizaciones sin resultado ninguno. – VNA