Unidades de ingeniería desactivaron hoy con seguridad una bomba de fragmentación de 250 kilogramos recién detectada en la sureña provincia vietnamita de Ba Ria- Vung Tau.

Tres días antes, un grupo de constructores descubrió el artefacto, de 1,55 metros de longitud, durante la instalación de cable telefónico en la comuna de Binh Trung, distrito de Chau Duc, y al ser informado los ingenieros militares lo trasladaron a un campo de tiro lejos de zonas residenciales.

A 39 años del término de la guerra de resistencia vietnamita contra invasores estadounidenses, el país indochino aún está contaminado por un gran volumen de municiones sin explotar esparcidas por fuerzas norteamericanas, cuyo peso total se estima en 800 mil toneladas.

Expertos también calcularon que la nación necesita unos 10 mil millones de dólares y décadas de trabajo para resolver ese problema.

De acuerdo con estadísticas oficiales, minas y bombas remanentes de la guerra cobraron desde 1975 más de 40 mil vidas humanas en Vietnam y dejó heridas a 60 mil otras, y la mayoría de las víctimas son pobladores rurales y niños. – VNA