Gran impacto causaron en Vietnam los logros del Grupo Empresarial cubano Labiofam referidos a medicamentos de probada eficacia fabricados a partir del seudo tallo del plátano, del mango y del veneno de escorpión.

El representante para Asia de esa firma de productos farmacéuticos, Jorge Luis Martínez, y de Yudith Rodríguez, vicedirectora de la empresa Biorat, radicada en Vietnam, expusieron sobre esas conquistas ante un plenario formado por investigadores y científicos de la nación indochina.

Entre toda la gama de productos en oferta de Labiofam, llamaron la atención los oriundos del plátano y el mango, en ambos casos abundantes en este país asiático.

Tras estudios de laboratorios, ensayos y registros sanitarios acordes con las regulaciones internacionales, se comercializan los medicamentos Asmacan, Nutrisol, Ferrical, Acitan, Propolina, Vimang y Vidatox, concebidos y elaborados en las instalaciones de la entidad cubana.

Asmacan es un bronquiodilatador, expectorante y aneroxidante, muy efectivo para asmáticos ambulatorios; Nutrisol, un reconstituyente que se indica para anemia, anorexia y convalecencias, al igual que el Ferrical, aunque éste último se recomienda para padecimientos anémicos más específicos.

El Acitan provee un suplemento a la fibra diétetica faltante en el organismo, estimula procesos más saludables y constituye un efectivo protector de la mucosa gástrica, mientras que la Propolina se utiliza como restauradora de desórdenes inmunológicos, cicatrizante, anti-parasitario, antinflamatorio, analgésico y antibacterial, todo a la vez.

Labiofam cobró notoriedad por una línea de productos elaborados a partir de la corteza del árbol del mango, llamados Vimang, los cuales, entre otros usos, constituyen un suplemento nutricional para sujetos sometidos a altas tensiones físicas o mentales.

Para el auditorio vietnamita resultó impactante la experiencia cubana con las dos árboles mencionados, tomando en cuenta las posibilidades de intercambiar experiencias, transferir tecnologías y emprender asociaciones empresariales.

De esta última hay un hecho concreto con la existencia desde 1998 de la fábrica de bioraticidas Biorat, en la ciudad de Can Tho, donde laboran un centenar de trabajadores vietnamitas.
Los asistentes también pusieron particular interés en la utilización del veneno de escorpión, con el cual se fabrica un medicamento denominado Vidatox para tratamientos complementarios de cáncer.

Se trata de una fórmula de base homeopática que alivia el dolor, reduce los procesos inflamatorios, incrementa la calidad de vida y la supervivencia sin ningún efecto adverso.

Más de 15 mil enfermos se han beneficiado con las posibilidades de ese fármaco que se comenzó a fabricar en 1995, pero su volumen nunca llegará a ser muy extenso, a causa de los límites reproductivos de la especie animal.- VNA