La agencia policial internacional Interpol confirmó que examinará más pasaportes sospechosos tras la detección de que al menos dos pasaportes registrados como perdidos o robados en su base de datos fueron utilizados por pasajeros a bordo del vuelo desparecido de Malaysia Airlines.

Interpol dijo que ningún país hizo comprobaciones en su base de datos sobre los pasaportes del italiano Luigi Marald y el austriaco Christian Kozel desde el momento en el que fueron robados en Tailandia y el despegue del avión.

“Aunque es muy pronto para especular sobre cualquier conexión entre estos documentos robados y la aeronave desaparecida, claramente es de gran preocupación que cualquier pasajero fuera capaz de abordar un vuelo internacional utilizando un pasaporte robado que aparece en las bases de datos de Interpol”, dijo en un comunicado el secretario general de la organización, Ronald Noble.

El 9 de marzo, la policía tailandesa investiga la pista de dónde se compraron los billetes electrónicos de los pasajes de Maraldi y Kozel, que condujo a Pattaya, un popular destino turístico al sur de Bangkok.

Por su parte, el secretario de la primera ministra tailandesa, Suranand Vejjajiva, informó que la Marina envió un barco y un avión a las cercanías de la isla malaya de Langkawi para ayudar a las labores de búsqueda y rescate.

En mismo día, el subasesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos Tony Blinken señaló que la administración de Barack Obama inspecciona los datos de que los pasajeros del avión desaparecido utilizaron pasaportes falsos, pero evitó hacer conclusiones.

El vuelo MH370 despegó el sábado de Kuala Lumpur a las 00.41 hora local (16.41 GMT del viernes) y tenía previsto llegar a Beijing unas seis horas más tarde.

Las autoridades malasias de la Aviación Civil indicaron que su última posición en el radar antes de que se perdiera la señal fue a las 01.30 hora local del sábado (17.30 GMT del viernes).

Los viajeros son de 13 nacionalidades (china, malaya, indonesia, australiana, francesa, estadounidense, neozelandesa, ucraniana, canadiense, rusa, italiana, holandesa y austriaca). Entre ellos, se encuentran 158 ciudadanos chinos y dos menores. – VNA