Situada a una altura de mil 500 metros sobre el nivel del mar, en el distrito del mismo nombre, provincia de Dien Bien, la meseta rocosa de Tua Chua posee un magnífico paisaje natural que atrae a muchos turistas nacionales y extranjeros.

A unos 130 km del centro de la provincia de Dien Bien, la meseta, con tres cuartos de su área de montañas de rocas escarpadas, es considerada la segunda altiplanicie de Dong Van, primer geoparque del país.

Desde el centro del distrito de Tua Chua, tomamos la ruta provincial 129. Condujimos por unos 30 km de carreteras serpenteantes, pasamos numerosas montañas altas y valles profundos, y llegamos al lugar. Después de un viaje tan difícil, disfrutamos de una magnífica vista de bosques y montañas de la región noroeste del país.

Tua Chua pertenece a las comunas de Sin Chai y Ta Phin. Las montañas de rocas escarpadas en este sitio no son altas como las de la meseta de Dong Van, en la provincia de Ha Giang, y forman colinas ondulantes a lo largo de la ruta 129. El clima local no es tan severo, los pobladores pueden desarrollar la economía agrícola a través de la siembra de maíz, arroz, durazno y ciruela.

Nos encontramos con Ha Mac y su esposa, de la aldea de Seo Phin, cuando araban en pequeños terrenos entre las piedras rugosas. El marido montaba el búfalo para arar en surcos y su esposa caminaba detrás para sembrar semillas de maíz. A veces, el animal se detenía por un rato, y luego continuaba trabajando.

Mac explicó que los búfalos en esta zona son sensibles. Si chocan con algunas piedras en su camino, se detienen por lo cual los arados de los agricultores locales rara vez se dañan.

Viéndolos trabajar duro en la tierra rocosa donde plantan las semillas que son también sus esperanzas, constatamos lo difícil es la vida para estos pobladores, y la buena convivencia entre el hombre y la naturaleza.

En Tua Chua se encuentran aldeas del grupo étnico Mong Si o Mong Do, con casas antiguas de arquitectura única que atraen la atención de todos los que visitan el lugar. La de Thao A Mang es una de ellas, con techo de piedra. Nos contó que debía viajar hasta la zona del río Da para buscar las piedras adecuadas, las cuales transportaba a su aldea en caballo y finalmente por autobús. Este techo le costó unos 90 millones de dongs, equivalente al valor de tres búfalos.

El señor To Van Tuan, subjefe del Departamento de Agricultura del distrito de TuaChua, nos acompañó a visitar la reliquia local de la ciudadela Vang Long. Según registros históricos, fue construida hace más de dos siglos y es considerada una obra arquitectónica artística de alto valor histórico y cultural.

Vang Long fue construida a mano, en un círculo cerrado con piedras, sin ayuda de ningún tipo de pegamento. Las placas rocosas se colocaron de una manera científica, las grandes en la parte inferior y las más pequeñas en la superior. La obra tiene tres metros de altura y su superficie es de más de un metro de ancho, con suficiente espacio para hombres y caballos.

Un día de visita en la meseta TuaChua es realmente demasiado poco para disfrutar plenamente de su belleza pintoresca. Antes de salir, subimos a la cima de una roca alta para disfrutar de una vista panorámica de esta obra maestra de la naturaleza.-VNA