El secretario del Comité del Partido Comunista de Hanoi, Pham Quang Nghi, elogió a las fuerzas de Guardacostas y de la Administración Pesquera por sus labores desde que China colocó ilegalmente una plataforma petrolífera en aguas vietnamitas el 2 de mayo.

En una reunión la víspera aquí en la Comandancia de Guardacostas de Vietnam, afirmó que el ambiente pacífico para el desarrollo en la capital se debe a los esfuerzos y hazañas de las fuerzas en el mar, incluida la guardia costera.

Las autoridades municipales y los pobladores prestan especial atención a aquellos que salvaguardan la soberanía sagrada en el mar e las islas del país, remarcó.

Dado que la protección del territorio nacional es una lucha a largo plazo llena de penurias y dificultades, los guardacostas deben ser pacientes, ingeniosos y valientes al exigir a Beijing a retirar la plataforma petrolera Haiyang Shiyou-981 de la zona económica exclusiva vietnamita, subrayó.

En un encuentro con el colectivo de la Administración Pesquera, el jefe partidista capitalino elogió su firmeza y valentía para defender la autoridad soberana nacional.

El 2 de mayo, China emplazó de forma perversa la plataforma petrolífera Haiyang Shiyou-981, escoltada por numerosos barcos armados, naves militares y aviones de combate, en un lugar a 80 millas marinas dentro de la zona económica exclusiva de Vietnam.

Esos navíos acompañantes realizaron agresivos ataques, como el uso de cañones de agua de alta presión y choques físicos a las embarcaciones oficiales y civiles de Vietnam, causando múltiples lesiones humanas y pérdidas materiales.

Recientemente, el barco chino número 11209 embistió y hundió al pesquero vietnamita DNa 90152 pese a que realizaba operaciones normales en su caladero tradicional.

A finales de mayo, China ancló esa perforadora a la zona de 15 grados 33 minutos 38 segundos de latitud Norte y 111 grados 34 minutos 11 segundos de longitud Este, a 25 millas náuticas al Este -Sureste de la isla de Tri Ton del archipiélago de Hoang Sa (Paracels) de Vietnam y a 23 millas náuticas al Este-Noreste de la ubicación anterior, pero todavía dentro de la aguas jurisdiccionales de Vietnam.

Tal peligrosa movida es una clara y grave violación de las leyes internacionales, sobre todo de la Convención de la ONU sobre el Derecho en el Mar (UNCLOS) de 1982, y la Declaración de Conducta en el Mar Oriental firmada por el propio Estado chino. También amenaza directamente la paz, la estabilidad, la seguridad y la libertad de navegación en el Mar Oriental.

Con moderación, buena voluntad y sinceridad, Vietnam empleó todos los canales a todos los niveles para protestar por ese acto violatorio y exigir la retirada inmediata de su plataforma petrolera Haiyang Shiyou – 981 y los barcos armados y militares de las aguas jurisdiccionales del país indochino.

Sin embargo, la respuesta de Beijing a esa reclamación legítima y pacífica de Hanoi fue el uso continuado de la fuerza y el aumento de las acciones intimidatorias cada vez más peligrosas, además de proferir calumnias. – VNA