La policía de Tailandia usó hoy gases lacrimógenos y chorros de agua para dispersar a los manifestantes opositores con intención de entrar en edificios gubernamentales en Bangkok.

La tensión se incrementó luego de los enfrentamientos la víspera entre los manifestantes en contra y a favor del gobierno tailandés, que dejaron por lo menos dos muertos y 45 heridos.

Con anterioridad, e l gobierno tailandés promulgó la Ley de Seguridad Interna en la capital de Bangkok y sus alrededores y anunció el despliegue de unos tres mil militares para controlar la situación.

La primera ministra, Yingluck Shinawatra, reafirmó la disposición de su gobierno de dialogar con todas las oposiciones para encontrar una solución pacífica a la actual crisis política.

En la semana pasada, el ex viceprimer ministro y líder de la opositora, Suthep Thaugsuban, instó a los manifestantes a ocupar organismos gubernamentales e instituciones estatales con la intención de paralizar el aparato gubernamental.

Thaugsuban también propuso el establecimiento de la Comisión Popular por el Cambio de Tailandia integrada por 37 miembros para sustituir al actual gobierno.

Los manifestantes pretenden ocupar los edificios del Gobierno, la Agencia Nacional de Policía, la División Policíaca de Bangkok y los ministerios de Educación, de Trabajo, del Interior, de Relaciones Exteriores y de Comercio.

Como una reacción ante ese plan, el vicepremier Pracha Promnok reiteró que el gobierno no usará sus fuerzas para dispersar a los protestantes y llamó a los líderes opositores a dialogar con el poder estatal.

Calificó de violación constitucional la propuesta de los manifestantes sobre la creación de una comisión popular, así como su ocupación de sedes estatales.

Miles de personas participaron en los recientes actos contra el proyecto de Ley de Amnistía que permitiría – según la oposición – el retorno al país del ex primer ministro tailandés Thaksin Shinawatra, quien vive en el exilio.-VNA