La primera ministra interina de Tailandia, Yingluck Shinawatra, expresó su confianza en que las fuerzas militares no realizarán un golpe de Estado para poner fin a la actual crisis política.

En una rueda de prensa en Bangkok la víspera, Yingluck dijo que el golpe de Estado contra el expremier Thaksin Sinawatra en 2006 no resolvió ningún problema, sino que causó inestabilidad política y sediciones.

La primera ministra hizo esa declaración ante el llamado de los protestantes al Ejército a derrocar el gobierno.

En la misma jornada, los partidarios del gobierno, conocidos como los “camisas rojas”, anunciaron su respaldo a las próximas elecciones generales y advirtieron que las exigencias de la oposición pretenden obstruir la democracia con riesgos de formar un “sistema de dictadura”.

Con anterioridad, Yingluck Shinawatra, rechazó dimitir como exigen los opositores y llamó a los manifestantes a dejar las marchas y participar en los próximos comicios para el día 2 de febrero.

A pesar de los esfuerzos del gobierno, los manifestantes afirmaron que seguirá su protesta con el fin de establecer una Consejo Popular para realizar reformas políticas antes de las elecciones generales.

El exviceprimer ministro Suthep Thaugsuban, quien encabeza las protestas, volvió a pedir la renuncia de la primera ministra, así como de los miembros de su gabinete temporal y dio un ultimátum de 24 horas con la amenaza de prolongar las manifestaciones.-VNA