La exvicepresidenta de Vietnam, Nguyen Thi Binh, escribió una carta a amigos en el mundo para denunciar la instalación ilegal china de una plataforma petrolífera en aguas jurisdiccionales vietnamitas y recabar el apoyo internacional a la lucha justa de su pueblo contra esa violación.

Muchos amigos me preguntan: ¿Qué está pasando en Vietnam?, ¿El pueblo vietnamita que luchó muchos años y sufríó pérdidas incontables, debe continuar luchando?, “Por qué puede China violar la soberanía de Vietnam?.

Así comenzó la exdirigente su misiva para cuestionar esa actitud de China, que en el pasado apoyó a Vietnam en la lucha contra la invasión estadounidense y comparte un sistema político similar.

A continuación, la Agencia vietnamita de Noticias presenta el texto íntegro de esa carta.

“Ustedes nos ha ayudado durante los 30 años de resistencias contra los franceses y estadounidenses, por supuesto que comprenden a fondo el precio que nuestro pueblo debió pagar por la paz, independencia y unificación nacional. Más de tres millones de personas fallecieron, una nación fue devastada por la guerra y sus consecuencias siguen latentes, especialmente cientos de miles de víctimas incurables del Agente Naranja.

“En 1974, en medio de la guerra con los estadounidenses, China usurpó el archipiélago Hoang Sa (Paracel) de Vietnam. Después de la confrontación, Estados Unidos impuso el embargo contra el país durante 20 años. Tan pronto como terminó la conflagración, después de varias escaramuzas en la frontera del norte, China envió más de 20 mil soldados para- como dijeron sus líderes- “dar una lección a Vietnam”. Pero, ¿qué lección? Es imposible entender cuando un gran país “socialista” invade a uno pequeño “socialista” que acabó de salir de una guerra. Sin embargo, ¡ésta es la pura verdad! En 1988, China ocupó con la fuerza varias islas pertenecientes al archipiélago vietnamita de Truong Sa (Spratlys).

“Hoy día, el pueblo vietnamita, a pesar de múltiples dificultades, se empeña en la construcción y el avance del país. También despliega sus mayores esfuerzos por un ambiente de paz, estabilidad y cooperación con otros países para el desarrollo.

“Incluso con Estados Unidos, que nos causó cuantiosos sufrimientos, decidimos mirar al futuro y dejar atrás el pasado. Con China, gran país vecino, pese a las vicisitudes de la historia y las diferencias subsistentes, deseamos una buena relación e insistemos en resolver las disputas por vías pacíficas, sobre la base de la confianza mutua. Y así actuamos, con modestia y moderación.

“Qué va a pasar ahora?

“Como ustedes saben, China instaló ilegalmente el 2 de mayo pasado una gigantesca perforadora petrolera adentro de la plataforma continental y zona económica exclusiva de Vietnam, escoltada por más de un centenar de barcos, incluidos militares y aviones.

“Esta acción unilateral viola gravemente la soberanía de Vietnam y la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982. Utilizamos la vía diplomática y otros canales, además de enviar barcos de la guardia costera para exigir a China respetar la soberanía nacional y retirar inmediatamente su equipo perforador. Empero, la respuesta de Beijing a esa reclamación legítima y pacífica fue el uso continuado de la fuerza y el aumento de las acciones intimidatorias cada vez más peligrosas.

“Al ver las imágenes de grandes buques chinos atacando a barcos vietnamita, muchoss más pequeños que los de ellos, quedé en shock. Me pregunto: ¿Qué seguirá a esos indignantes actos?

“La opinión mundial está preocupada por esos actos de China que amenazan la seguridad y libre navegación internacional y regional. La parte china, sin vergüenza, hizo falsas acusaciones echando la culpa sobre Vietnam ¿Quién puede creer que Vietnam, con una población equivalente a un quinto de la de China y un Producto Interno Bruto de 50-60 veces menos, y en esfuerzos por salir del subdesarrollo y la pobreza, sea capaz de intimidar al gigante país vecino?

Bejing dice que su política es de “ascenso pacífico” y que la “agresión” y el “control hegemónico” no fluyen en la sangre de los chinos. Entonces, ¿Cómo puede explicar su infundada reclamación sobre la llamada “línea de nueve tramos” que pretende “monopolizar” casi la totalidad del Mar Oriental, en desafío al derecho internacional, la UNCLOS y también la protesta de todo el mundo?

“La independencia, libertad y soberanía son sagradas para cada nación. El pueblo vietnamita lucha hasta las últimas consecuencias para protegerlas. Necesitamos la paz y la amistad para el desarrollo, para que todos los vietnamitas, entre ellos mujeres y niños, tengan una mejor vida.

“Deseamos fervientemente una paz justa, verdadera y duradera para nuestro país, así como para otros pueblos en la región y el mundo. Aspiramos a la amistad con China y otros estados, pero una amistad sincera y verdadera sobre la base del respeto mutuo. Creo que si estuvieran en nuestros zapatos, pensarían como nosotros.

“Por lo tanto, anhelamos contar con el apoyo de ustedes como nos respadaron anteriormente y de inmediato en la demanda a China de retirar su plataforma petrolífera del lecho continental marítimo de Vietnam y respetar la soberanía de nuestro país conforme a las leyes internacionales.

“Creemos que si nos solidarizamos y actuamos con firmeza, la justicia y la ley se cumplirán”.-VNA