El Senado estadounidense aprobó, con todos votos a favor, la resolución S.RES.412 sobre el Mar Oriental, en la cual exige a China a retornar el statu quo de esta zona marítima como estaba antes del día 1 de mayo.

La resolución reafirma el fuerte apoyo del Gobierno de Estados Unidos por la libertad de navegación y el uso del mar y espacio aéreo en la región de Asia-Pacífico conforme a las leyes internacionales, así como las soluciones diplomáticas pacíficas para las diputas y reclamaciones territoriales.

La nota destaca la importancia vital de esta línea de transporte y reitera que el aumento de las operaciones de patrullaje y la imposición de regulaciones para territorios, áreas marítimas y espacio aéreo en disputa escalan la tensión e incrementan riesgos de confrontación.

También enumera una serie de acciones chinas que violan las leyes internacionales, incluida la Declaración de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982.

Especifica el caso del 1 de mayo pasado cuando la Corporación Nacional de Petróleo Submarino de China (CNOOC) emplazó ilegalmente la plataforma petrolífera Haiyang Shiyou-981, acompañada por más de 25 barcos, en el bloque 143, a 120 millas náuticas de la costa de Vietnam.

Posteriormente Beijing movilizó más de 80 naves, entre ellos siete militares, los cuales intimidaron las embarcaciones del guardacostas vietnamita y las embistieron intencionalmente en repetidas ocasiones, además del uso de helicópteros y cañones de aguas.

China también estableció una zona exclusiva con un radio de tres millas náuticas alrededor del equipo perforador, lo que socava la seguridad marítima en la región y viola gravemente las leyes internacionales.

La resolución afirma que las reclamaciones territoriales y las acciones chinas son injustificables de acuerdo con lo establecido en la UNCLOS y constituyen un intento unilateral de cambiar el statu quo por la fuerza y una violación a la Declaración sobre la Conducta de Partes en el Mar Oriental (DOC) que China firmó en 2002 con la ASEAN.

También condena la coerción, la amenaza y el uso de la fuerza que obstaculizan las operaciones de navegación, y urge al gobierno chino a retirar la plataforma petrolífera y los barcos de escolta del lugar de ubicación y retornar el statu quo del Mar Oriental como estaba antes del 1 de mayo. – VNA