La tasa de hambre en la región sudesteasiática registró una disminución más rápida del mundo en las dos décadas últimas al reducir de 31,1 por ciento a 10,7 por ciento, según la valoración de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

En contrario, las regiones del oeste y sur de Asia, así como del África del norte fracasaron en lograr las metas de la erradicación de la hambruna, debido a las guerras y desventajas geográficas, señala el recién informe de la institución mundial sobre el estado de la deficiencia alimenticia universal en 2013.

A pesar de su tendencia bajista, la tasa de personas con hambre ocupa una octava parte de la población mundial, cifra que significa 842 millones, continúa la fuente.

Ese resultado se debió al crecimiento económico consecutivo en países desarrollados y el aumento del rendimiento agrícola gracias a los programas de asistencia público- privado, observó la FAO.

Pronosticó al mismo tiempo que esa tendencia continuará y el cumplimiento de la meta del milenio de reducir a la mitad el número de personas que sufren hambre en los países en vías de desarrollo planteada por la ONU para 2015 está al alcance de la mano. -VNA