El Parque Nacional Nui Chua combina historia y naturaleza, con paisajes de bonsái, de bosques semi-tropicales o animales silvestres y exrefugios de los guerrilleros vietnamitas durante la guerra contra el invasor estadounidense, entre otros atractivos.

Ubicado en la central provincia de Ninh Thuan, muestra regiones similares a las desérticas por la escasez de precipitaciones, mientras otras ofrecen una tupida selva que resguardó a los patriotas de los bombardeos norteamericanos.

De unas 30 mil hectáreas, el Nui Chua adquirió en 2003 categoría de Parque Nacional y se localiza en el extremo sur de la cordillera de Truong Son, con su punto culminante, Co Tuy, el cual sobresale entre otras elevaciones todas rozando la altura de mil metros.

Esa zona de la instalación registra una temperatura templada a lo largo de todo el año, pese a ubicarse en una latitud tropical, y según el director del parque, Huynh Vinh Kim, la estación seca de noviembre a agosto resulta la ideal para las visitas o recorridos.

"El contraste de paisajes montañosos, boscosos y marinos, donde abunda una alta biodiversidad, le otorgan un atracción especial al sitio”, apuntó Kim.
A la entrada de la instalación, los turistas apreciarán árboles verdes que nacen y crecen entre piedras y arena, en un clima muy caluroso y seco, por lo que no alcanzan alturas considerables y semejan una colección de bonsai.

Durante la primavera predomina el color amarillo, aunque se combina con el rojo de los árboles Ochna, cuyas flores adquieren tonalidades de ese tipo y una curiosidad, algunas tienen hasta 13 pétalos.

Los visitantes pueden recorrer el Nui Chua a través de una red de carreteras asfaltadas que suman 20 kilómetros y que conectan el Monte Nui Chua, el paso de Ngoan Muc y el Lago de Treo en el Monte Da Vách a una altura de 250 m.

La flora incluye 390 plantas medicinales, más de 100 variedades de bonsái y otras muchas variedades comestibles, así como 306 especies de vertebrados, incluidos el oso de cuello blanco y el jaguar.
Los turistas también pueden elegir entre las numerosas playas repartidas en unos 40 kilómetros o bucear y ver arrecifes de coral o si lo prefieren llegar hasta esa curiosidad marina en barco.

La más lejana localidad del Nui Chua es la playa Thit, donde miles de tortugas depositan sus huevos, un espectáculo con todas las de la ley para quienes quieran conocer un poco más de la vida de esos curiosos animales.

Para los senderistas hay previsto un recorrido hasta la villa Cau Gay, hogar de la minoría étnica Raglai, y de paso visitar las tiendas de artesanía local para echar un vistazo a las obras maestras que crean manos laboriosas.

Muy cerca de allí se localizan asentamientos que utilizó el Ejército de Liberación Nacional en la guerra contra el agresor estadounidense, en los cuales se ven vestigios de trincheras y de cocinas que no exhalaban humo para evitar la localización de los guerrilleros.

En aquella todavía cercana época, la ahora pacífica y hermosa costa resultaba la vía idónea para que los patriotas del Norte enviaran armas y otros equipos militares a sus hermanos del Sur./.