Todas las actividades de construcción y consolidación de las islas artificiales a gran escala para convertir los arrecifes en bases militares y establecer zonas de identificación aérea en las áreas de disputas del Mar Oriental violan las leyes internacionales.

Durante el sexto seminario científico internacional denominado “Mar Oriental: Cooperación por seguridad y desarrollo en la región”, concluido ayer tras dos jornadas de debates en la ciudad central de Da Nang, los expertos nacionales enfatizaron que esas acciones provocan inquietud, escala la tensión en la zona e incluso pueden ocasionar conflictos.

Remarcaron que las ambiciones marítimas de China se demuestran claramente en sus reivindicaciones cada vez más fuertes en los mares del Este y China Oriental.

Expresaron su preocupación por la nueva concepción de Beijing sobre la estructura de seguridad en el área y la situación geopolítica regional que se torna más compleja cada día con la creciente competencia de las grandes potencias.

Figuraron entre los contenidos principales de la cita los nexos internacionales en los asuntos concurrentes, las reclamaciones soberanas y las regulaciones territoriales, espacios marítimos y aéreos establecidas en leyes internacionales.

Los especialistas centraron su debate también en las normas sobre una zona económica exclusiva (ZEE) de 200 millas náuticas desde las líneas de base, de acuerdo con las cuales Vietnam posee suficiente base legal, conforme a las leyes internacionales, que confirma sus derechos soberano y jurisdiccional sobre la ZEE.

Por otro lado, prestaron atención a la iniciativa de “eje marítimo” del presidente indonesio Joko Widodo y consideraron Yakarta como un integrante activo en el impulso de la colaboración marítima en la región.

Subrayaron la necesidad de intensificar las contribuciones de las organizaciones internacionales como las Naciones Unidas y la Unión Europea, mediante el intercambio de experiencias prácticas sobre las soluciones y principios legales para prevenir conflictos.

Formularon varias recomendaciones para aliviar la tensión actual, tales como elaborar un código de conducta, trazar regulaciones conjuntas sobre las actividades de las fuerzas militares en el mar a fin de garantizar la libertad y seguridad de navegación y evitar las colisiones imprevistas.

Constituyen otras medidas el establecimiento del mecanismo de cooperación tanto en el enfrentamiento a las amenazas no convencionales como en la explotación de recursos naturales y el fomento del intercambio de informaciones sobre el mar.

Varios de los delegados coincidieron en que además de los desafíos, la situación en el Mar Oriental crea condiciones para que los miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia (ASEAN) y sus contrapartes busquen soluciones apropiadas al respecto.

Por su parte, durante la clausura del simposio, el embajador Dang Dinh Quy, director de la Academia Diplomática de Vietnam, exhortó a los delegados a aclarar el statu quo en el Mar Oriental y las responsabilidades de las partes concernientes para mantenerlo, así como elaborar soluciones legales en conformidad con las leyes internacionales.- VNA