El Delta del Mekong ocupa el primer lugar en el país en términos de producción de arroz, acuicultura, procesamiento de mariscos, árboles frutales… y también es una región fuertemente afectada por el cambio climático. Se están adoptando varias soluciones para hacer frente a sus impactos, incluido el empeoramiento de la sequía y la intrusión de agua salada.
Una investigación del Instituto de Ciencias de los Recursos Hídricos del Ministerio de Recursos Naturales y Medio Ambiente señalan que los daños causados por la intrusión de agua salada en la región del Delta del Mekong ascienden a unos 2,76 millones de dólares al año. Según los cálculos, la demanda de agua en el Delta del Mekong para 2030 será de 2,5 a 2,7 millones de m3/día y noche y para 2040 será de 3 a 3,2 millones de m3/día y noche.
Respuesta basada en la naturaleza
En la Resolución del Gobierno número 120/NQ-CP emitida en 2017 sobre el desarrollo sostenible del Delta del Mekong que se adapta al cambio climático, esta región se divide en tres zonas.
La zona núcleo de agua dulce, ubicada río arriba, siempre tiene agua dulce, incluso en condiciones extremas, por lo que la región ha sido priorizada para el cultivo de arroz y frutas junto con la acuicultura de agua dulce.
La siguiente es la zona de aguas salobres con regímenes hídricos alternativos. Aquí se podría cultivar arroz durante la temporada de lluvias, cuando hay agua dulce disponible. Sin embargo, el sistema agrícola local necesita adaptarse al agua salina y salobre en la estación seca para convertir estas condiciones hídricas en oportunidades, en lugar de una obsesión como ahora.
La tercera zona son las zonas costeras que se enfrentan a la intrusión de agua salada durante todo el año. Es necesario desarrollar sistemas agrícolas que se adapten a esta condición.
Las técnicas de previsión, junto con la construcción de obras de riego y planes de respuesta basados en la naturaleza, han permitido un mejor control de la sequía y la intrusión de agua salada.
Situadas aguas abajo del río Mekong hay zonas de agua salobre donde muchas localidades tienen experiencia en afrontar la escasez de agua dulce para sostener la producción agrícola. Por lo tanto, lo que hay que hacer es utilizar y promover cultivos y animales criados aquí durante generaciones para generar los beneficios económicos deseados.
Según Le Van Tien, jefe de la División de Agricultura y Desarrollo Rural del distrito de Thanh Phu en la provincia de Ben Tre, los árboles de sa sam (Launaea sarmentosa), cultivados en el distrito de Thanh Phu, aportan buenos ingresos a la población en período de grave intrusión de agua salada. La planta es tanto una especie vegetal como herbácea, por lo que las empresas han transferido técnicas de producción y comprado toda la producción a los agricultores de las comunas de Thanh Phong y Thanh Hai.
Una medida importante para adaptarse a la intrusión de agua salada es combinar los valores tradicionales y modernos de los cultivos autóctonos, incluido el “sa sam”.
Nguyen Van Sanh, analista de políticas del Delta del Mekong
Con más de 65 kilómetros de costa, la provincia de Ben Tre tiene un gran potencial para desarrollar “sa sam”, lo que ayudará a aumentar tanto el área de cultivo de plantas medicinales como los ingresos de los locales. La tierra puede cultivarse alternativamente con otros cultivos y su cuidado requiere menos mano de obra y agua, dijo Nguyen Van Sanh, analista de políticas del delta del Mekong.
Se requieren esfuerzos conjuntos para superar la temporada de sequía
El Delta del Mekong, especialmente las ocho provincias costeras, se ven afectados con frecuencia por la sequía y la intrusión de agua salada. A pesar de años de preparación, la región todavía sufrió sequía e intrusión de agua salada este año. Las condiciones eran incluso más graves que las que se creía que estaban en niveles récord en 2016 y 2020, lo que empujó a muchas localidades a numerosas dificultades.
Ante la sequía y la intrusión de agua salada que se pronostica que durarán hasta mayo, el viceprimer ministro Tran Hong Ha celebró a principios de abril una teleconferencia con las localidades afectadas para elaborar medidas que garanticen el suministro de agua para la vida cotidiana y la agricultura de la población.
Según Nguyen Hong Khanh, subdirector del Departamento de Irrigación del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, durante la sequía y la intrusión de 2024, las localidades prepararon y desplegaron de forma sincrónica actividades de suministro de agua para los hogares afectados, tales como equipos, herramientas de almacenamiento del agua, establecimiento de puntos públicos de suministro de agua, conexión de estaciones de suministro de agua, ampliación de las tuberías y perforación adicional de pozos de explotación, uso de equipos de filtración de salinidad y monitoreo de salinidad para el correcto funcionamiento del proyecto.
En la actualidad, el número de hogares afectados es mucho menor, equivalente a solo alrededor del 50% en comparación con la temporada seca de 2019-2020, mientras que el alcance del impacto también es menos grave ya que los lugareños se han equipado de manera proactiva con contenedores de agua y han utilizado el agua de manera más eficiente. Las compuertas antiagua salada en el Delta del Mekong también han demostrado ser efectivas, ayudando a aliviar los daños a la agricultura.
La sequía y la intrusión de agua salada deberían considerarse una característica del Delta del Mekong, y en las previsiones debería prestarse más atención a los planes de respuesta preparados para las actividades diarias y la producción agrícola. Además, es necesario adaptar las estructuras agrícolas y ganaderas a la sequía y a la intrusión de agua salada, al mismo tiempo que se idean soluciones y se construyen instalaciones que sirvan a la reestructuración.
El director del Instituto Meridional de Investigación de Recursos Hídricos, Tran Ba Hoang.
Nguyen Hong Khanh informó que el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural está elaborando un plan maestro sobre seguridad del agua y de presas y embalses para el período 2021-2030 con una visión hasta 2050.
El ministerio también recomendó que cada hogar de la región construya o se equipe con grandes contenedores de agua para recolectar y almacenar el agua de lluvia para la estación seca, lo cual es una solución factible y también esencial./.
