Hanoi - Muchos investigadores nacionales e internacionales ponderan como objetos importantes desde hace mucho tiempo las Nueve Urnas Dinásticas colocadas frente al templo The To de la Ciudadela Imperial de Hue.
Tras conquitar el número absoluto de votos de los 23 países miembros, en la décima reunión plenaria del Comité de la UNESCO para Asia-Pacífico del Programa Memoria del Mundo, celebrada en Mongolia, las urnas fueron reconocidas como Patrimonio Documental.
La sesión aconteció el 8 de mayo de 2024 y la conferencia se centró en revisar 20 documentos que tienen un valor multifacético y se adhieren a criterios como importancia regional, singularidad y rareza.
De acuerdo con los estudiosos, las nueve grandes urnas de bronce datan de diciembre de 1835, bajo el reinado del emperador Minh Mang (1820- 1841).
Tal reliquia se construyó para glorificar a los reyes Nguyen, demostrando su poder y estabilidad. Una altura de alrededor de dos metros y un peso de hasta dos mil 600 kilogramos distingue a cada pieza, que –a su vez- conmemora a un emperador de la dinastía Nguyen, la última corte feudal vietnamita, que gobernó de 1802 a 1945.
Hermosos tesoros nacionales
Relatan los historiadores que el rey Minh Mang ordenó la producción y fundición de las urnas en diciembre de 1835. Más de un año después, el trabajo se completó y siguió perfeccionándose.
Pese a dos siglos de erigidas, todas las urnas reales siguen en pie en sus ubicaciones originales y permanecieron intactas durante las guerras.
Se trata de copias originales y únicas. Desde su formación, las Nueve Urnas Dinásticas nunca han sido reparadas, ni siquiera un pequeño detalle. Por tanto, tienen un valor original único y se consideran insustituibles. En 2012, fueron reconocidas como tesoro nacional.
Urnas dinásticas acopian vívidas imagenes sobre la biología vietnamita
Investigadores históricos advierten que las referidas urnas devienen también una enciclopedia geográfica de Vietnam a principios del siglo XIX, con patrones tallados exquisitamente en relieve en su superficie que representan paisajes y actividades diarias de todo el país, incluidas imágenes de plantas y animales típicos.
De los 162 motivos en relieve de las urnas de bronce de la dinastía Nguyen en Hue, hasta 90 imágenes ilustran la flora y la fauna típicas vietnamitas.
Igualmente, pueden considerarse un Libro Rojo de Vietnam o una lista de especies que necesitaban protección en la antigüedad.
Conservar valor internacional
Como era común en la época de origen, las Nueve Urnas Dinásticas están escritas en caracteres chinos y los documentos están representados por imágenes con nombres de lugares, nombres de reyes, criaturas, plantas, ríos y montañas. En particular, afirman la soberanía de la nación sobre mares e islas.
El Reino de Dai Nam, como se conocía entonces a Vietnam, fue gobernado por la dinastía Nguyen desde 1802 hasta 1945 con 13 reyes. Entre ellos se encuentran Gia Long como emperador fundador y Bao Dai, el último.
El cuarto hijo del emperador Gia Long, identificado como Minh Mang, gobernó durante 21 años e implementó importantes reformas durante su reinado. Bajo su liderazgo, el territorio vietnamita alcanzó su mayor extensión. En 1838, tomó la decisión de cambiar el nombre del país a Dai Nam, y también la hoy ciudad capital pasó de llamarse Thang Long a Hanoi, nombre que se ha mantenido hasta la actualidad.
Sumado a sus destacados valores informativos, documentales y enciclopédicos, las Nueve Urnas se consideran obras maestras de las técnicas vietnamitas de fundición de bronce del siglo XIX.
Calificadas de objetos únicos por los expertos, las Nueve Urnas se crearon con la aspiración de construir un país fuerte y estable para las generaciones futuras. Han pasado por casi dos siglos y se han convertido en una colección de antigüedades extremadamente rica y valiosa. El reconocimiento mencionado de la UNESCO constituye un honor para el país indochino y contribuirá a la preservación y promoción de este importante tesoro cultural./.