Es errónea la información de que Viet Nam trasladó a la fuerza a 400 seguidores de la secta budista de Lang Mai del monasterio de Bat Nha en la provincia altiplana de Lam Dong, afirmó la portavoz de la Cancillería Nguyen Phuong Nga.

En una conferecia de prensa efectuada hoy en esta capital, la diplomática explicó que se trata de una discordia entre los seguidores budistas de dos sectas diferentes procedentes del Convento de Bat Nha, dirigido por el Venerable superior Thich Duc Nghi, y de Lang Mai.

La intervención de las autoridades locales fue para impedir el desorden, garatizar la seguridad y bienestar de los ciudadanos y promover el respeto hacia la persona de los monjes de la secta de Lang Mai.

Recordó que entre mayo de 2008 y setiembre de 2009, con garantía del Venerable Thich Duc Nghi, numerosos seguidores de Lang Mai se concentraron en el Monasterio.

Luego el administrador de Bat Nha cesó la garantía y pidió a esas personas salir del Convento, hecho que no fue cumplido por los seguidores de Lang Mai y de ahí surgió la disputa entre los fieles de las dos sectas.

Tras el incidente, la Sangha budista de Viet Nam tomó iniciativa para resolver el asunto, determinando que ese grupo de seguidores de Lang Mai continuara permaneciendo en el convento de Bat Nha durante el período de Vassa ( del 14 de abril al 14 de julio según el calendario lunar), y abandonara el establecimiento tras ese lapso.

Según el portavoz, el incumplimiento de ese acuerdo por parte de grupo de Lang Mai provocó la concentración de seguidores de Bat Nha el pasado día 27 de septiembre.

Con la actuación de las autoridades locales, el día siguiente el grupo de Lang Mai salió del convento. Muchos de ellos retornaron a casa y unas 194 personas se alojan en la pagoda de Phuoc Hue, sin amenaza alguna contra ellas.

Reiteró la inalterable política del Estado nacional de respeto a la libertad de culto y religiones y que las organizaciones religiosas disfrutan de favorables condiciones para sus actividades de acuerdo con el registro y las regulaciones de las provincias sobre la seguridad y el orden social.

Comentó que el hecho de que los seguidores de Lang Mai hicieron cursillos en el Monasterio de Bat Nha sin autorización de la Sangha Budista nacional ni de autoridades correspondiente es una violación de los trámites administrativos y las estipulaciones de la Carta de esa iglesia budista.

Ese grupo debe retornar a su pagoda y cuando traslada a otro lugar para realizar prácticas religiosas necesita cumplir las formalidades correspondientes erstablecidas por la iglesia y la ley nacional, concluyó Phuong Nga./.