Múltiples actividades socio – culturales se celebraron a lo largo de Vietnam durante el último fin de semana, en ocasión del Festival de Medio Otoño, la fiesta infantil que cae en el día 15 del octavo mes del calendario lunar.

El Museo de Etnología en Hanoi se convirtió, en esa ocasión, en un escenario de una espectacular y emotiva fiesta, donde los pequeños tuvieron la oportunidad de acercarse a la cultura insular del país mediante juegos folclóricos, artes de plástica con coquillas de caracoles y platos típicos de las regionales litorales.

También participaron en talleres de preparación de "banh nuong" y "banh deo" los tradicionales pasteles de la luna, y fabricación de juguetes tradicionales.

En tanto, unos dos mil niños disfrutaron de canciones populares y gimnasia rítmica en un programa artístico efectuado el sábado en el Palacio de la Infancia en la capital, durante el cual se otorgó becas a 200 menores desfavorecidos con destacados méritos en el estudio.

Significativas actividades dedicadas a pequeños pobres, minusválidos y huérfanos se celebraron en diversas localidades en todo el país, entre ellas las provincias de Ba Ria – Vung Tau, An Giang, Soc Trang, Ben Tre, Ca Mau y Ninh Binh y la ciudad de Can Tho.

La ciudad de Phan Thiet, provincia central de Binh Thuan, se iluminó anoche con el resplandor de miles de farolillos, hechos por unos tres mil estudiantes locales, quienes desfilaron – al son tumultuoso de tambores de las danzas del león – por las calles de esta hermosa urbe balnearia.

Los faroles se decoraron no sólo con tradicionales imágenes de personajes de cuentos antiguos, sino también con ideas encaminadas hacia el mar y las islas territoriales, como figuras de hitos de la soberanía nacional y naves de las unidades de guardacostas.

Este festejo fue reconocido por la revista Vietbooks como “El mayor desfile de farolillos en el Festival de Medio Otoño de Vietnam” y recibió el premio The Guide Awards para “La fiesta cultural más peculiar y exitosa al servicio del turismo nacional.”

La provincia norteña de Lao Cai devino un auténtico mercado de productos de juguetes del Festival de la luna, de ellos los disfraces, linternas y tambores fabricados en las aldeas artesanales captaron el mayor interés de los consumidores.

Cada juguete folclórico conlleva una historia educativa ligada con una determinada alusión literaria, esperamos que mediante ellos la infancia pueda percibir la cultura tradicional del pueblo, expresó Bui Van An, residente local.

Un relevante destino para excursionistas en la ocasión es la Velada de Linternas en Sapa, mayor polo turístico de Lao Cai, la cual se celebró el sábado con una espectacular marcha de 55 fenomenales obras – de no más de 1,8 metros de alto y 3,5 de largo cada una – y atrajo a decenas de miles de visitantes. – VNA