Fuente de inspiración de poetas y músicos por ser inseparable de los arrozales y campos vietnamitas, el bambú canaliza hoy la creación de talentosos pintores que crearon una corriente propia preñada de identidad nacional.

Considerada por muchos expertos internacionales como una técnica única en el mundo, la pintura de bambú permitió al artista Nguyen Kim Xuan reunir una rica colección de más de 500 dibujos, sorprendentes por su finura y diversidad de colores.

La pequeña sala de exposición de Kim Xuan está repleta de imágenes incrustadas en ese material sobre la vida rural vietnamita: un dúo en el canto tradicional de Quan Ho, una feria campesina, los paisajes típicos de una aldea antigua o un festival folklórico.

Duong Hoang Yen estudiante del Colegio de Cultura y Artes de Hanoi reconoció el impacto que le causó la primera vez que contempló esas pinturas, pues en su opinión cada una tiene una belleza muy propia.

Durante años, Kim Xuan desarrolló técnicas para decorar miles de piezas de bambú en cada obra y aplicarlas en diferentes materiales de fondo como mimbre, terciopelo, óleo o madera lacada.

“Lo más difícil es el cambio continuo de colores en una misma barra de bambú. Como se usan solo colores naturales, el artista debe combinar y aprovechar los matices originales, y por tal motivo, cada obra es inimitable”, explicó.

Gracias a esa originalidad, sus dibujos han ganado respeto y admiración, también entre los extranjeros.

Para Kim Xuan antes que una profesión, es el amor o la pasión lo que permite crear obras únicas, de gran valor.

Sin duda alguna, sus pinturas agregan valores al bambú. La planta, como símbolo de l indoblegable espíritu y la resistencia de los vietnamitas, reafirma una vez más su papel inspirador para las artes.

A diferencia de las decoraciones de Kim Xuan, esta corriente de pintura en la aldea Xuan Lai del distrito Gia Binh en la provincia de Bac Ninh, utiliza el bambú como material de fondo con lo que se acerca más a la artesanía popular.

“Las llamamos pinturas de bambú ahumado, puesto que usamos el humo como el factor generador de brillo en estas obras en blanco y negro”, explicó Nguyen Ky, el dueño de un taller de ilustraciones en Xuan Lai.

Cada una de esos dibujos ahumados requiere meses de trabajo, que incluyen seleccionar las barras y preservarlas en líquido, quitar las cáscaras, hornear el bambú, juntar barras en plano, esculpir el dibujo y rascar la faz para que la obra sobresalga con diferentes efectos de claridad.

Es una técnica muy compleja, aunque el artesano emplee solo un cuchillo para crear el dibujo final de un plano de bambú ahumado, afirmó.

Pese a la supuesta facilidad en cuanto a materiales e instrumentos, esas obras requieren de la habilidad, de la creatividad y sobre todo, de la pasión del artista.

La artesana Nguyen Thi Bich Thuy aseguró que siente un inmenso amor por ese oficio cada vez que un visitante muestra su admiración por las pinturas de bambú.

Para los aldeanos de Xuan Lai, además de ser un amigo cercano, la especie vegetal constituye un precioso regalo de la naturaleza para la prosperidad local.

En homenaje a la rectitud de esta planta nacional los artistas la utilizan en sus obras para reflejar el alma vietnamita. –VNA