Sin la ayuda de los combatientes internacionalistas vietnamitas, no existiría la victoria sobre el régimen genocida de Pol Pot el 7 de enero de 1979, reiteró Sim Sokhom, cónsul general cambodiano acreditado en Ciudad Ho Chi Minh.

Al intervenir hoy en el acto conmemorativo a los trigésimosextos aniversarios de la efeméride y el triunfo de la defensa de la frontera suroeste y el trigésimo quinto del establecimiento de la Asociación de Amistad Hanoi- Phnom Penh de la mayor urbe sureña de Vietnam (31 de diciembre), Sokhom remarcó que gracias a esa ayuda valiosa, el pueblo cambodiano podría sobrevivir y desarrollar el país como ahora.

Tras expresar el profundo agradecimiento a los soldados voluntarios vietnamitas, subrayó que ningún individuo puede distorsionar la historia, especialmente la firme solidaridad entre los dos países.

Por su parte, Truong Minh Nhut, presidente de la asociación de amistad bilateral, recalcó que el 7 de enero de 1979 marcó un hito importante de la solidaridad internacional desinteresada y la amistad especial entre ambas partes.

Ese hecho histórico ayudó a Cambodia a salir del genocidio de Pol Pot y abrir una nueva era de independencia, libertad y resurrección, notificó.

Especialmente, el fomento del intercambio de las delegaciones de alto nivel en 2014 demostró que ambos países conceden gran importancia a los nexos bilaterales y la cooperación integral, añadió.

El régimen del Khmer Rojo, liderado por Pol Pot, es responsable de la muerte de casi tres millones de cambodianos entre 1975 y 1979.

Durante su invasión en el territorio suroeste vietnamita, los Khmer Rojos mataron a los pobladores locales, incluso ancianos, mujeres y niños y violaron gravemente la independencia, soberanía e integridad territorial de Vietnam.

Ante las atrocidades de Pol Pot y en respuesta al llamamiento del pueblo vecino, los combatientes vietnamitas se unieron con sus similares cambodianos para derrocar a ese régimen cruel.- VNA