Extendidossobre unas 630 mil hectáreas en las comunas de Ban Luoc, San Sa Ho, BanPhung, Ho Thau, Nam Ty y Thong Nguyen, esos infinitos arrozales poseenuna belleza original, gracias a la labor de los campesinos.
Los bancales de ese grano tienen una significación históricapara las comunidades dedicadas a ese cultivo, uno de los principales eneste país indochino.
Bajo el sol, las tonalidades deverde y oro de los campos se aprecian en líneas curvas que entregan undeslumbrante espectáculo para sus observadores. Aferrados a las laderasde las montañas, los campos se mezclan con el blanco y el azul de lasnubes y el cielo.
Hoy día, la localidad sobresaledentro de las rutas turísticas en el Noroeste del país. Los visitantesnecesitan varias horas para coronar la cima de las elevaciones y desdeallí contemplar esa obra magistral, una combinación mágica de lanaturaleza con las creaciones del hombre. –VNA