Dang Anh Tuan, representante de Vietnam Airlines, afirmó a reporteros de laAgencia Vietnamita de Noticias (VNA) que la aerolínea nacional ha estado dispuestaa acompañar al gobierno y al pueblo en cualquier lugar y momento, justo desde elinicio del brote de la pandemia del COVID-19.
Aseguró la voluntad de todos los trabajadores de la empresa de “escuchar alllamamiento de la Patria” para estar en la vanguardia en la lucha contra laepidemia, aunque saben que se enfrentan al alto riesgo de contagio.
De acuerdo con Anh Tuan, como mismo ocurrió durante la campaña de repatriaciónde ciudadanos vietnamitas en Wuhan, China, un gran número de trabajadores deVietnam Airlines dieron el paso al frente para subir al vuelo 41 que realizó laaerolínea para traer a los coterráneos a casa desde el extranjero.
Más de 130 voluntarios, incluidos pilotos, azafatas, técnicos y personal detierra, estuvieron listos para ese vuelo especial, con 219 pasajeros a bordo, entrelos cuales había más de 120 infectados del nuevo coronavirus. Pocos puedenimaginar que hasta dirigentes de Vietnam Airlines expresaron la voluntad departicipar en esa operación.
“Todos los vuelos de ese tipo cumplen con los estándares más estrictos, con elpersonal más calificado. Accesorios y repuestos se encargaron al avión, comopreparativo para los problemas técnicos potenciales. Se fortaleció también el personalde tierra para supervisar los vuelos, como una tarea de prioridad máxima,”precisó Anh Tuan.
Bajo el liderazgo del gobierno y la Dirección para la prevención y el controldel COVID-19, añadió, Vietnam Airlines efectuó a lo largo de un mes decenas dereuniones para debatir hasta los detalles más pequeños del vuelo hacia el paísafricano.
Con experiencias en casos anteriores como la evacuación de trabajadoresvietnamitas en Libia en 2011 y 2014, o Japón debido a la histórica doble tragediadel terremoto y tsunami en 2011, Vietnam Airlines colaboró con autoridades delos Ministerios de Transporte y de Salud para estar preparado en el escenario dereportarse casos sospechosos.
Esa labor resultó más difícil y costó más tiempo, según Anh Tuan. VietnamAirlines tuvo que pensar en la instalación de purificadores de aire y cabinas aisladasen el fuselaje, la protección de los asientos, la esterilización de la aeronave,así como el suministro de equipos de protección.
Añadió que fue un “quebradero de cabeza” el suministro de combustible al aviónen el aeropuerto Bata, donde abordaron los ciudadanos vietnamitas en GuineaEcuatorial, pero se quedó sin reservas de hidrocarburo ni capacidad paraatender al modelo de fuselaje ancho que utiliza la aerolínea.
Gracias a la colaboración oportuna y estrecha entre Vietnam Airlines y lasautoridades competentes, ese problema se resolvió.
El momento en que el vuelo tocó tierra en el aeropuerto internacional de NoiBai, en Hanoi, el capitán Pham Dinh Hung declaró llenó de alegría a reporterosde la VNA: “¡El vuelo está a salvo! ¡Ninguno de los pasajeros experimentóproblema alguno a lo largo del itinerario desde Bata hasta Noi Bai!”.
En la cola esperando para ser trasladado al centro de cuarentena, el integrantede la tripulación Hoang Quan, quien sirvió en tres vuelos de repatriación deVietnam Airlines, dijo a la VNA que esa operación fue diferente y máspeligrosa, ya que hubo a bordo pacientes confirmados del COVID-19.
“Soyjoven, y tengo que superar el miedo para cumplir mi misión,” afirmó, antes de agregarque se les pidió a los tripulantes evitar al máximo el contacto con lospasajeros, “un desafío verdadero”, calificó.
El joven aseguró que está dispuesto a participar en las futuras operaciones deeste tipo de Vietnam Airlines./.