
“El vuelo C17 despegó de la capital Juba y aterrizó en el aeropuertointernacional de Noi Bai, Hanoi. Al momento de regresar a la patria me sentíemocionada”, compartió la teniente Cao Thuy Dung, enfermera auxiliar delhospital de campaña de segundo grado número 2.
Dung fue una de los soldados vietnamitas que cumplió la misión de mantenimientode la paz en el país surafricano desde noviembre de 2019. Su tarea debíaterminar en un año, pero por el COVID-19, duró otros seis meses.
Superar las dificultades generadas por el COVID-19
El nuevo coronavirus estalló en Sudán del Sur en abril de 2020. Desde entonces,el hospital de campaña enfrentó la escasez de equipos y materiales médicos. Losartículos llevados de Vietnam se agotaban, mientras el abastecimiento eraimposible debido al cierre de la frontera y la suspensión de los vuelosinternacionales y nacionales.
Sudán del Sur está devastado gravemente tras una década por conflictos yguerras, la vida de los pobladores locales enfrenta numerosas dificultades.Ante el “tsunami” llamado COVID-19, la situación empeoró.
“Tenemos que ahorrar cada mascarilla médica y cada pastilla para asegurar tantoel cumplimiento de la misión como el trabajo de prevención y reserva en casoque se estrelle la pandemia con gran cantidad de pacientes”, compartió Vo VanHien, director del hospital.
Bentiu, donde se ubica el hospital de campaña vietnamita, es un área complicadacon escasas instalaciones sanitarias,sin condiciones para realizar pruebas, lo que hace que las enfermedades sepropaguen fácilmente.

Pese a tales dificultades, el hospital mantuvo el funcionamiento de la líneadirecta las 24 horas los siete días de la semana, sin dejar ningún caso consíntomas de enfermedad, dijo Van Hien.
También organizamos con frecuencia cursos de entrenamiento y realizamossimulacros para garantizar la seguridad de los funcionarios y trabajadores delhospital, agregó.
Con la determinación de cumplir la misión
La aparición de la pandemia del COVID-19 en el mundo se convirtió en un desafíosin precedentes para las operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU.
Hay momentos en que el personal del hospital estaba muy preocupado cuando lasituación política y de seguridad en el área se volvió tensa, la epidemia secomplicó o cuando algún compañero o familiar enfermó.
Sin embargo, los casos azules vietnamitas se unieron y juntos superaron todaslas dificultades, cumpliendo la misión noble y humanitaria encomendada por el EjércitoPopular de Vietnam.
Los soldados están extremadamente orgullosos de contribuir con suresponsabilidad a la misión general del ejército y de la nación.
Siento el gran significado al ser una parte del Ejército Popular de Vietnam yhaberme incorporado a las operaciones de paz, contribuyendo a promover laimagen del país ante los amigos internacionales, dijo la enfermera auxiliarThuy Dung. /.