Las fuerzas militares acantonadas en la provincia norteña vietnamita de Hung Yen desactivaron dos bombas de racimo, lanzadas por aviones estadounidenses durante la pasada guerra.

El Mando militar provincial precisó que los artefactos, de más de 100 kilogramos, 80 centímetros de longitud y 30 de anchura cada uno, fueron descubiertos en los alrededores del río Rojo por los pobladores locales.

Desde 2012 hasta la fecha, esa entidad ha detonado más decenas de explosivos, lo que contribuyó a garantizar la seguridad de la población y obras de transporte en esa región.

Según las estadísticas, Vietnam cuenta con seis millones de hectáreas, un 20,12 por ciento de la superficie nacional, contaminadas con esos letales remanentes, cuyas explosiones causan la muerte de centenares de personas cada año. – VNA