Las expresiones pacíficas y adecuadas del patriotismo y la lucha contra acciones extremistas constituyeron el tema de una tribuna abierta organizada hoy en la central provincia vietnamita de Dong Nai, con la participación de casi mil obreros.

Los oradores del encuentro reafirmaron que las muestras del patriotismo y condena a los actos ilícitos de China en la zona económica exclusiva de Vietnam en el Mar Oriental son acciones legítimas.

Sin embargo, hay personas que aprovecharon la situación para realizar actividades ilegales, sabotearon plantas manufactureras, incluidas las foráneas, provocaron desorden social y afectaron la producción, la vida cotidiana de la población, el ambiente de inversiones y las políticas hacia el exterior del Partido Comunista y Estado, señalaron.

Solicitaron la calma y la lucidez de los trabajadores en la protesta al acto ilegítimo y provocativo de China en el Mar Oriental y la toma en conciencia de las políticas del Partido Comunista y el Estado.

Las autoridades de Dong Nai también visitaron empresas de China y de Taiwán (China) radicadas en la provincia y ratificaron su compromiso sobre la garantía de la seguridad y la operación normal de esas entidades económicas.

Según informes oficiales, el 90 por ciento de las empresas en el territorio volvieron a sus actividades habituales.

La Corporación Nacional de Petróleo Submarino de China instaló desde el 2 de mayo la plataforma petrolífera Haiyang Shiyou – 981 en una zona de 15 grados 29 minutos 58 segundos de latitud Norte y 111 grados 12 minutos 6 segundos de longitud Este, ubicada absolutamente en la zona económica exclusiva y la plataforma continental de Vietnam, a unas 120 millas náuticas de su costa.

El gobierno chino movilizó casi 90 barcos armados, incluidos militares, para escoltar ese ingenio – los cuales realizaron ataques con cañones de agua y choques directos a naves vietnamitas – y prohibió además ilegalmente a las embarcaciones de los otros países a navegar en la zona a tres millas náuticas de esa plataforma.

Esa acción unilateral de la parte china constituye una grave violación a la soberanía, los derechos jurisdiccionales de Vietnam, refrendados en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982, y va en contra de las leyes internacionales y la Declaración de Conducta en el Mar Oriental entre la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia y Beijing (DOC), firmada en 2002.

También damnifica a los sentimientos sagrados entre los dos pueblos y generan una profunda indignación en todos los vietnamitas y los amantes de la paz y la justicia en el mundo. – VNA