El secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, escribió el artículo “Futuro para la generación joven en la era de ascenso”, destacando el papel de los jóvenes para la prosperidad y el desarrollo del país.
A continuación, la Agencia Vietnamita de Noticias les presenta artículo íntegro:
A lo largo de la historia de la fundación y defensa de la patria, los jóvenes siempre han ocupado un lugar importante, siendo comparados con los pilares decisivos para la prosperidad de la nación. En todas las etapas de la revolución desde la llegada del Partido Comunista, los jóvenes siempre han sido la fuerza pionera, desempeñando un papel fundamental, desde la lucha por la independencia y la reunificación del país hasta el proceso de renovación y el desarrollo socioeconómico. Se puede decir que la historia de nuestro Partido desde su fundación hasta hoy siempre ha llevado las huellas de las generaciones de jóvenes sobresalientes y destacados de la nación. Los primeros Secretarios Generales, los líderes brillantes del Partido, los grandes intelectuales de Vietnam, todos ocuparon cargos importantes desde que eran aún jóvenes.
En la etapa actual, el papel de la juventud se ha vuelto aún más crucial. Los jóvenes no son solo el pilar para llevar al país con firmeza hacia una nueva era, la principal fuerza para construir y desarrollar nuevas fuerzas productivas, sino también el equipo pionero que participa en nuevos campos. Los jóvenes son los dueños del futuro de la nación, y al mismo tiempo, un factor clave en la construcción de los sistemas de valores nacionales, culturales y familiares y los estándares del ser humano vietnamita.
Logros y Desafíos
El desarrollo, la sostenibilidad e incluso el destino de la nación dependen en gran medida de la juventud y de las nuevas generaciones. En las luchas sagradas del pueblo contra el imperialismo y la invasión extranjera para ganar independencia, libertad y proteger la integridad territorial y soberanía sagrada de la patria, millones de jóvenes han dedicado su vida con el lema “morir por la patria es vivir”. La historia de la nación siempre recordará a las generaciones de jóvenes que marcharon al frente "con el corazón lleno de esperanza hacia el futuro" con el espíritu de "más firme que la cordillera de Truong Son" y "no volveremos hasta que la guerra haya terminado". En la lucha, en la construcción y defensa de la nación, siempre vemos la imagen de los jóvenes en el movimiento “tres listos", "mujeres con tres responsabilidades", "cinco voluntarios", o el espíritu "donde sea necesario, allí están los jóvenes", "los jóvenes lideran la industrialización y modernización del país" y "jóvenes vietnamitas, osados en pensar, en hacer, y en asumir responsabilidades"... En los últimos años, la juventud de Vietnam ha alcanzado logros importantes en diversos campos como la academia, los deportes y la cultura, contribuyendo a reafirmar la posición del país en el ámbito internacional. Los jóvenes vietnamitas han ganado continuamente premios prestigiosos en competiciones internacionales de matemáticas, física, química, informática, creatividad científica y técnica, y arte, entre otros. Estos éxitos demuestran la inteligencia y la fuerte capacidad competitiva de la juventud vietnamita en un entorno globalizado. En el ámbito deportivo, los jóvenes también han establecido continuamente hitos orgullosos en competiciones regionales y mundiales, demostrando claramente su fortaleza física y su espíritu de combate inquebrantable.
En cuanto a la cultura, la juventud ha jugado y sigue desempeñando un papel importante en la preservación, conservación y promoción de la identidad cultural nacional. En el contexto de la integración internacional, muchos valores culturales tradicionales de Vietnam se han promovido ampliamente en el mundo a través de los esfuerzos constantes de los jóvenes en actividades de intercambio cultural internacional, programas culturales y artísticos diversos y creativos.
Sin embargo, junto con esos logros, también enfrentamos muchos grandes desafíos. A pesar de que la calidad de la fuerza laboral vietnamita ha mejorado, todavía existe una brecha considerable con respecto a los países desarrollados, especialmente en términos de creatividad, productividad laboral, habilidades prácticas y dominio de idiomas extranjeros. Actualmente, Vietnam se encuentra en el grupo de las 34 economías más grandes del mundo, sin embargo, nuestra productividad laboral ocupa el puesto 117 de 181 países y/o territorios encuestados, equivalente solo al 11,4% de la productividad de Singapur, al 35,4% de la de Malasia, sin contar otros países desarrollados.
En los últimos años, junto con el desarrollo de la economía, Vietnam ha logrado importantes avances en la mejora de la calidad de vida, la educación y la salud para el pueblo. Sin embargo, en cuanto a la condición física, la salud general y la altura promedio de los jóvenes, todavía existe una clara brecha en comparación con los países de la región y los Estados desarrollados en el mundo. La altura promedio de los hombres en Vietnam en la última encuesta de 2020 fue de 168,1 cm, mientras que la de las mujeres fue de 156,2 cm, más baja que la de países de la región como Tailandia (hombres 171 cm, mujeres 159 cm), Corea del Sur (174 cm y 161 cm) y Japón (172 cm y 158 cm). La esperanza de vida de los vietnamitas actualmente es de 74,5 años (casi el doble que en 1945 con 45 años y cerca de 50 años en 1975), pero sigue siendo de 5 a 10 años más baja que la de Japón (84,6 años), Corea del Sur (83,5 años) o Alemania (81,2 años). La tasa de desnutrición infantil en Vietnam (19,6%) también es mucho más alta que en países desarrollados como Japón (2%) o Singapur (4%), lo que demuestra que los problemas de nutrición en la niñez siguen afectando a largo plazo la salud física de los jóvenes. En las competiciones deportivas de alto rendimiento, Vietnam puede obtener buenos resultados en deportes que requieren habilidades, pero es difícil competir en aquellos que exigen fuerza y resistencia.

Otro desafío es que Vietnam está entrando en la etapa final del período de población dorada, mientras que el fenómeno de envejecimiento de la población está ocurriendo a un ritmo muy rápido. En 2011, la tasa de personas de 60 años o más representaba más del 10% de la población total, y para 2022, esta tasa había aumentado a alrededor del 12,8%, lo que equivale a aproximadamente 12,5 millones de personas mayores. Se prevé que para 2036, la tasa de personas de edad avanzada alcance el 20%, lo que significa que Vietnam entrará en una etapa de envejecimiento poblacional. A medida que la población envejece, la proporción de personas en edad de trabajar disminuye, mientras que el número de personas dependientes aumenta, lo que conduce a una carga financiera cada vez mayor para la población en edad laboral. El sistema de salud y atención médica también estará bajo una presión creciente, ya que la demanda de atención para las personas mayores aumentará significativamente. Este es un gran desafío para la planificación de estrategias de desarrollo sostenible, con el fin de aprovechar eficazmente el recurso humano joven antes de entrar en la fase de población envejecida.
En el contexto de la globalización cada vez más fuerte, la identidad cultural nacional de Vietnam enfrenta el riesgo significativo de desaparecer. El fenómeno de intercambio e integración cultural a escala global ha traído muchos beneficios económicos y sociales, pero también ha generado grandes desafíos en cuanto a la preservación y promoción de los valores culturales tradicionales. Las tendencias culturales extranjeras, si no se aceptan con cautela y de manera selectiva, pueden opacar e incluso erosionar las características inherentes de la cultura nacional. Una de las manifestaciones más claras de este problema es el cambio en el estilo de vida y el pensamiento de la juventud. Muchos jóvenes hoy en día adoptan fácilmente nuevos valores modernos del exterior sin prestar mucha atención a los valores tradicionales de la nación. La popularidad de los medios de comunicación, las redes sociales y el entretenimiento internacional ha hecho que muchos jóvenes se alejen cada vez más de los valores culturales distintivos de la nación, como las formas de arte tradicionales, los festivales populares, la gastronomía tradicional e incluso los valores éticos y el espíritu de unidad comunitaria, que son características propias del pueblo vietnamita. Los vicios sociales y la tasa de criminalidad entre los jóvenes se están volviendo cada vez más complejos e infiltrándose en la vida de una parte no pequeña de los adolescentes, lo que debilita la herencia genética de la nación.

En un mundo lleno de cambios
El mundo está entrando en una época de desarrollo sin precedentes en tecnología y ciencia. El rápido y poderoso avance de la inteligencia artificial, la biotecnología, el big data y la automatización están moldeando rápidamente y de manera significativa la forma en que trabajamos, vivimos y nos comunicamos a nivel global. Esto exige que cada país, incluido Vietnam, prepare cuidadosamente una generación joven que cumpla con los estándares rigurosos de recursos humanos para la integración y el desarrollo sostenible.
En términos de inteligencia, la juventud vietnamita de hoy necesita, más que nunca, habilidades de creatividad, pensamiento crítico y la capacidad de adaptarse rápidamente a los cambios tecnológicos. Los jóvenes deben ser formados para convertirse en pioneros en el dominio de nuevas tecnologías, con la capacidad de investigar, desarrollar y aplicar los logros más avanzados en la práctica. Al mismo tiempo, la juventud debe tener una mentalidad global, habilidades de comunicación internacional y competencias lingüísticas sobresalientes para integrarse activamente en el entorno internacional y competir de manera justa y efectiva con sus pares en el mundo.
Sin embargo, la inteligencia por sí sola no es suficiente. Una buena salud física y una firmeza mental también son condiciones imprescindibles para que la juventud pueda adaptarse y desarrollarse en un entorno global cada vez más competitivo. Una generación joven con una buena salud física asegurará una fuerza laboral de alta calidad, contribuyendo a la causa de construcción y defensa del país. Por lo tanto, la educación física debe ser aún más valorada, junto con el desarrollo de un sistema de salud pública y una infraestructura deportiva moderna, con el fin de mejorar la salud general y elevar la estatura de los vietnamitas.
En el proceso de integración internacional profunda, la juventud también debe ser educada y capacitada para mantener y promover la identidad cultural nacional. La cultura juega un papel fundamental como base espiritual en el desarrollo integral de la juventud vietnamita. La cultura no solo ayuda a definir la identidad nacional, sino que también es un poder blando importante, que ayuda a Vietnam a ratificar su posición y su imagen en el ámbito internacional. Al mismo tiempo, las buenas cualidades morales, un espíritu humanista profundo y una alta conciencia de responsabilidad social deben ser cultivados de manera continua, con el fin de formar una generación joven con la capacidad y la personalidad suficiente para contribuir positivamente al desarrollo común de la sociedad y del mundo.
La realidad demuestra que los países desarrollados, las grandes potencias mundiales y regionales priorizan el desarrollo integral de la educación, el fortalecimiento físico y la preservación y promoción de la cultura nacional para crear recursos humanos de alta calidad, que satisfagan los requisitos del desarrollo sostenible. Debemos aprender de estas lecciones internacionales y aplicarlas de manera flexible para formar una generación de jóvenes sobresalientes, asegurando que el país avance con firmeza en la nueva era.
Ante las nuevas oportunidades de la nación
Después de 80 años de fundación del país y 50 años de la reunificación nacional, y casi 40 años de implementación de la renovación, nuestro país está entrando en un período innovador en el desarrollo, abriendo nuevas oportunidades, pero al mismo tiempo, enfrentando desafíos sin precedentes. El país se está integrando cada vez más en la economía global, afrontando cambios profundos derivados de los avances en ciencia y tecnología, y de las fluctuaciones globales.
De cara al año 2045, hito que marca el centenario de la fundación del país, nos fijamos el objetivo estratégico de convertir al país en uno desarrollado de altos ingresos. Para lograrlo, Vietnam necesita una generación joven que no sólo sea intelectualmente excelente, sino también físicamente superior y arraigada de identidad cultural, capaz de competir y estar a la par de las potencias en los cinco continentes, afirmando la posición del país en la arena internacional.
La postura coherente del Partido y el Estado de nuestro país es poner al ser humano como base para el desarrollo sostenible, ya que el ser humano es tanto el fin último como la principal fuerza impulsora del desarrollo social. Y, el desarrollo socioeconómico debe apuntar a satisfacer las crecientes necesidades espirituales y materiales de la población. El desarrollo humano se convierte en un tema central y estratégico que decide el éxito del país. Por lo tanto, el trabajo relacionado con la juventud es una cuestión vital para la nación, uno de los factores decisivos para el éxito o fracaso de la revolución, y una tarea importante para todo el sistema político y la sociedad en su conjunto. Invertir y desarrollar a la generación joven se convierte en una prioridad estratégica de primera línea en la nueva etapa. Construir y cultivar una generación de jóvenes fuertes, inteligentes y civilizados es la base sólida para que Vietnam siga avanzando, convirtiéndose en un país desarrollado, un símbolo de la aspiración, el poder y la voluntad del pueblo.
Nueva orientación del desarrollo humano hacia 2045
Avanzar hacia el año 2045 con la visión de un Vietnam integralmente desarrollado, la orientación para el desarrollo humano, especialmente de la generación joven, se convierte en una prioridad estratégica. En primer lugar, es necesario invertir fuertemente en educación y formación para desarrollar la inteligencia y el conocimiento. El sistema educativo debe reformarse en profundidad, centrándose en el desarrollo de habilidades creativas, STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), idiomas extranjeros, habilidades digitales y tecnología moderna. La educación intelectual debe ir de la mano con la educación cultural, moral y estética para formar individuos integrales. Al mismo tiempo, promover el espíritu de autoestudio, el aprendizaje permanente y la construcción de una sociedad de aprendizaje integral también es una tarea clave. Para construir una fuerza de élite, también necesitamos políticas especiales para atraer a jóvenes talentos del extranjero y formar recursos humanos capaces de competir globalmente.
Junto con la educación intelectual, está la estrategia de mejorar la salud y la condición física de los vietnamitas. Es necesario fomentar el desarrollo sistemático y eficaz del deporte escolar para mejorar la estatura de los vietnamitas. Debemos establecer un objetivo específico para el año 2045: la altura promedio de los jóvenes vietnamitas debe alcanzar un nivel comparable con los países desarrollados en la región (por ejemplo, 175 cm para los hombres y 163 cm para las mujeres). Para materializar este objetivo, es urgente promover la atención de la salud para toda la población y construir infraestructuras deportivas modernas. También hemos de fijar el objetivo de aumentar la cantidad de atletas de alto rendimiento, con el fin de ganar medallas en grandes competiciones como los Juegos Deportivos de Asia (ASIAD) y los Juegos Olímpicos, no solo en deportes que requieren habilidades, sino también en disciplinas que demanden fuerza física y resistencia excepcionales.
La cultura es un elemento indispensable en la estrategia de desarrollo humano. Necesitamos seguir invirtiendo en preservar y promover el valor del patrimonio cultural y artístico, al tiempo que innovamos y modernizamos para adaptarnos a los nuevos tiempos. El objetivo es construir un pueblo vietnamita rico en identidad nacional: patriótico, benévolo, creativo e integrado sin asimilación. También se debe priorizar la promoción de la industria cultural y hacer de la cultura un motor económico y un poder blando nacional.
En la estrategia de desarrollo de la población, necesitamos mantener una estructura demográfica razonable, utilizando eficazmente el actual período dorado de la población antes de entrar en la fase de envejecimiento. Es preciso mejorar la calidad de la población mediante programas integrales de salud, nutrición y educación. Resulta importante implementar de manera sincrónica políticas destinadas a apoyar a las familias jóvenes, incentivar la fertilidad de reemplazo y brindar atención sanitaria integral a los niños.
Es especialmente importante fomentar en los jóvenes cualidades morales, ideales y aspiraciones de contribución. Necesitamos crear un entorno en el que los jóvenes puedan participar activamente en los campos de la transformación digital, la economía verde y los proyectos culturales nacionales, al tiempo que les alentamos a integrarse profundamente a nivel internacional. A través de ello, los jóvenes no sólo absorben la quintaesencia del mundo, sino que también difunden los valores culturales únicos de Vietnam al orbe.
Para hacer realidad estos grandes objetivos, el Partido y el Estado invertirán de manera fuerte e integral los recursos necesarios con el fin de crear las mejores condiciones para el desarrollo de la generación joven, especialmente la “Generación del ascenso”, que serán los jóvenes de dieciocho y veinte años en 2045. La educación, la formación, el deporte, la cultura y las políticas de población serán las principales prioridades en la estrategia nacional. Cada política y cada programa de acción estarán orientados hacia el objetivo de mejorar la calidad de vida y la competitividad internacional de la generación joven de Vietnam. El Partido y el Estado continuarán elaborando e implementando mecanismos y políticas que creen un entorno y condiciones favorables para que los jóvenes se desarrollen de manera sana, integral y armoniosa en los aspectos moral, intelectual, físico y estético.
Es necesario investigar y desarrollar grupos de políticas específicos y apropiados para promover el papel pionero de los jóvenes en la producción, así como su participación en la revolución industrial 4.0, su iniciativa en la investigación y aplicación de la tecnología, la transformación digital nacional, el emprendimiento y la innovación; y su asistencia a la implementación de proyectos y obras para el desarrollo socioeconómico, y garantía de la defensa - seguridad nacional e integración internacional.
Al mismo tiempo, es necesario implementar soluciones para formar recursos humanos jóvenes de alta calidad; revisar, modificar y complementar las políticas nacionales clave para los jóvenes talentos; y adoptar políticas innovadoras en materia de aprendizaje, orientación profesional, formación vocacional, empleo, vivienda e instituciones culturales y deportivas para los jóvenes. Hace falta identificar acciones específicas para prevenir, combatir y reducir los índices de criminalidad entre los jóvenes; implementar de forma sincronizada un conjunto de indicadores estadísticos sobre la juventud; y elaborar un conjunto de criterios para el desarrollo de la juventud a nivel provincial.
La Unión de los Jóvenes Comunistas Ho Chi Minh debe continuar innovando y mejorando la calidad, la efectividad, el contenido y los métodos de sus actividades, alineándolos con los objetivos de desarrollo de la localidad y el país, mejorando la vida material y espiritual del pueblo; enfocarse en la profundidad y efectividad práctica, asegurando un acceso amplio y profundo a todas las capas de la juventud. La organización juvenil debe promover el espíritu de dedicación, el papel pionero de los jóvenes en el desarrollo socioeconómico, la garantía de la defensa y seguridad nacional, la integración internacional; el desarrollo de la ciencia y la tecnología, el emprendimiento y la innovación, la transformación digital; la protección de las bases ideológicas del Partido, luchando contra los argumentos erróneos y hostiles, y participando en la prevención y reducción de la tasa de criminalidad entre los jóvenes.
Además del apoyo del Partido, del Estado y de las organizaciones sociopolíticas, el acompañamiento y la cooperación de la familia, la escuela y la comunidad empresarial son factores claves e indispensables en el camino de desarrollo de los jóvenes. La familia juega un papel fundamental, la escuela es el lugar para formar la inteligencia y la personalidad, y las organizaciones y empresas serán el entorno ideal para que los jóvenes demuestren su creatividad, practiquen habilidades y acumulen experiencia práctica.
Sobre todo, son los jóvenes quienes deciden el éxito de estos objetivos y visiones. Cada joven vietnamita debe ser proactivo en el aprendizaje, la formación y el esfuerzo constante para afirmarse. La generación joven debe salir al mundo con confianza, llevando consigo un bagaje de conocimientos profundos, una salud robusta y un alma rica en la identidad cultural vietnamita, y al mismo tiempo debe formarse como un ciudadano global con el espíritu vietnamita, contribuyendo a la construcción y defensa de la Patria.
Con esa visión, el centenario de la fundación del país será un hito importante que nuestro país espera con orgullo y expectativa. En el próximo viaje de 20 años hacia ese hito, compartimos una aspiración común: construir una generación de jóvenes vietnamitas sobresalientes en inteligencia, excepcionales en físico y profundamente arraigados en la identidad cultural, lo suficientemente confiados y valientes para estar al lado de sus amigos internacionales, contribuyendo a llevar al país hacia la grandeza y el desarrollo./.