A pesar de su impresionante crecimiento económico durante los últimos dos años, Filipinas sigue enfrentando desafíos en la reducción de la pobreza cuando más de 25 por ciento de su población vive en la miseria.

Según la Junta Nacional Coordinadora de Estadísticas, la tasa de la pobreza en Filipinas en 2012 fue de 25,2 por ciento, una ligera reducción en relación con 2009 (26,3 %).

El gobierno filipino se comprometió con los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU en erradicar la pobreza extrema y el hambre para 2015, lo que significa que deberá reducir la tasa de pobreza a 17,2 por ciento.

Según el ministro de Planificación Económica, Arsenio Balisacan, el gobierno aplicará medidas concretas para lograr esa meta, entre ellas la ampliación del programa de transferencia condicional en efectivo y el desarrollo de la agricultura y de recursos humanos.

Afirmó que los programas gubernamentales puestos en marcha empezarán a dar frutos en los años venideros y conseguirán reducir el índice de pobreza un 16 por ciento para el año 2016.

Filipinas es uno de los países más propensos a los desastres naturales, lo que le dificulta en la disminución de la tasa de pobreza, valoró Rosemarie Edillon, asistente del director general de la Agencia Nacional para el Desarrollo Económico del gobierno.-VNA