Hanoi, 24 may (VNA) – El presidente Barack Obama, ofreció hoy un discurso sobre la historia, el presente y el futuro de las relaciones entre Estados Unidos y Vietnam, ante miles de estudiantes reunidos en esta capital.
Al intervenir en un evento efectuado en el Centro Nacional de Convención, Obama, quien está en la primera visita en Vietnam en calidad de dueño de la Casa Blanca, dijo que durante este viaje, su corazón fue tocado por la hospitalidad que caracteriza a los vietnamitas, quienes le sonrieron y le saludaron, quienes le hicieron sentir la amistad entre los dos pueblos.
El mandatario reconoció que no es el primer presidente estadounidense que visitó Vietnam en los últimos años, pero si es una de las primeras personas en hacerse adultos tras la guerra en el país indochino.
Numerosos jóvenes, tales como sus dos hijas, han vivido sabiendo una sola verdad, que es la paz y la amistad entre Vietnam y Estados Unidos.
Al manifestar su respeto a la historia gloriosa de Vietnam, recordó que a lo largo de miles de años, el pueblo indochino cultivó en ese terreno, la historia es revelada en los tambores de Dong Son, y Hanoi permaneció al lado del río Rojo durante más de mil años.
El mundo atesoró la seda y la pintura de Vietnam, y el Templo de Literatura es un testigo de la persecución de conocimientos de los vietnamitas.
Destacó que tras siglos, el destino del país experimentó la intervención de diversos países pero como un árbol de bambú, el espíritu indomable del pueblo vietnamita fue capturado por el eminente general Ly Thuong Kiet (1019 – 1105, quien lideró las fuerzas vietnamitas para derrotar los invasores chinos de Song en 1077).
El cuadragésimo cuarto presidente de Estados Unidos citó versos del célebre poema “Nam Quoc Son Ha” (Montañas y ríos del Imperio del Sur), considerado como la primera declaración de independencia de Vietnam, que dice: “El Emperador del Sur reina las montañas y ríos que tallan el imperio del Sur. Su soberanía es escrita en el libro del cielo.”
Hablando más sobre los antiguos vínculos que conectan los dos países, recordó que hace más de 200 años, cuando Thomas Jefferson buscaba el arroz para su granja, miró hacia el grano de Vietnam, el cual, según lo que dijo, tenía la reputación de ser el más blanco, delicioso y productivo.
Además, el día que la nación indochina declaró su independencia, el Presidente Ho Chi Minh evocó la Declaracion de Independencia de Estados Unidos al proclamar que: “Todos los hombres son creados iguales. Están dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables, entre ellos están el derecho a la vida, a la libertad y a la búsqueda de la felicidad”.
Recalcó que todas las guerras provocan sufrimiento y tragedia y mencionó a millones de vietnamitas, tanto civiles como militares, quienes cayeron en la guerra, y también a más de 58 mil estadounidenses que no pudieron regresar a su tierra natal.
Tras apreciar los logros de Vietnam en el proceso de desarrollo, Obama afirmó que el mundo reconoció los grandes éxitos alcanzados por el país durante las últimas dos décadas.
Vietnam se ha incorporado a la economía global. Numerosos inversores extranjeros han realizado negocios en esa nación, la cual se convirtió en país de ingreso medio, así como una economía en crecimiento dinámico, con rascacielos, grandes urbanizaciones, y centros comerciales en Hanoi y Ciudad Ho Chi Minh.
Vietnam lanzó exitosamente satélites al espacio. Y una nueva generación ha emprendido nuevos negocios. La población nacional también contribuyó su voz al progreso y a la reducción de la pobreza. La clase media se ha extendido, la tasa de escasez económica disminuyó, mientras la mortalidad materna e infantil cayó. En contrario, aumentó el acceso al agua potable y electricidad, y alcanzó alto nivel la tasa de niños letrados. Esos son avances que alcanzó Vietnam en un tiempo muy corto, destacó Obama.
Respecto a la cooperación en el alivio de las secuelas de guerra, Obama aseguró que la voluntad de ambas partes de cambiar las relaciones bilaterales, de manera que la mismísima guerra que dividió las dos naciones se convierta en recurso para la conciliación, permitiendo la búsqueda de restos de los desaparecidos en la guerra y al final, su repatriación, así como posibilitando la remoción de explosivos remanentes. “Porque ningún niño debe perder una pierna” por esas minas y bombas sin detonar, enfatizó el primer presidente de color de Estados Unidos.
Afirmó que Estados Unidos está satisfecho con las actividades de descontaminación de explosivos remanentes en el aeropuerto de Da Nang, en el Centro de Vietnam, y aseguró que asistirá a Vietnam en las labores similares en el aeródromo de Bien Hoa, en el Sur.
De acuerdo con Obama, la reconciliación es vinculada con los excombatientes quienes una vez enfrentaron a otros, entre ellos el senador John McCain - un exprisionero - se reunió con el general Vo Nguyen Giap, quien le dijo que los dos países no deben ser enemigos, sino amigos. Los estadounidenses y vietnamitas se esforzaron en cicatrizar las heridas de guerra, para brindar enormes beneficios a ambos países.
Los dos pueblos son cada vez más aproximados, las actividades comerciales son cada vez más frecuentes, y estudiantes y académicos de las dos naciones realizan estudios conjuntos, señaló. Estados Unidos recibió más universitarios vietnamitas que cualquier país asiático. Un gran número de turistas estadounidenses visitó Vietnam, recorriendo por el casco antiguo de Hanoi, por la villa antigua de Hoi An y por la ciudad imperial de Hue.
Tanto vietnamitas como estadounidenses pueden relacionarse con palabras escritas por el músico Van Cao (1923 – 1995, eminente personalidad de la música revolucionaria, autor del Himno de Vietnam), que: “Desde ahora conocemos la tierra natal de cada uno, desde ahora aprendemos cómo siente el uno por el otro”, citó el presidente Obama.
Expresó su esperanza de que la asociación integral entre los dos países sea cada vez más estrecha. “En esta visita, deseamos construir una base aún más sólida para las relaciones en décadas próximas,” declaró. Tras describir como algo inimaginable en el pasado el hecho que actualmente las dos naciones se han convertido en amigos y contrapartes, Obama manifestó su convicción de que las experiencias adquiridas por ambas partes en la guerra pasada servirán como lecciones para todo el mundo. En un tiempo en el que numerosos conflictos parecen inextricables, Vietnam y Estados Unidos evidenciaron que el cambio es factible, que un mejor futuro es posible. Los dos países demostrarán la determinación de construir la paz, pues es siempre mejor que la guerra, porque el progreso y los valores verdaderos de los seres humanos son los que necesitan ser promovidos, no la guerra ni conflicto, apuntó.
Aseveró que Vietnam es un país soberano e independiente y que ninguna otra nación pueda imponer su voluntad a ese pueblo. La independencia y la soberanía de Vietnam, la decide el pueblo vietnamita, apostilló.
Estados Unidos presta especial atención a Vietnam, al éxito de ese país y a la asociación integral bilateral, afirmó.
Tras expresar la disposición de contribuir más a las relaciones binacionales, Obama subrayó la necesidad de aumentar la cooperación para crear la prosperidad y oportunas verdaderas para la población, así como de invertir más en el desarrollo de los recursos humanos. Dijo que numeras empresas de primera categoría y prestigiosas universidades de Estados Unidos han incrementado la cooperación con contrapartes vietnamitas en sectores como ciencia – tecnología, matemática y salud.
Manifestó su esperanza de conectar los empresarios jóvenes de ambos países y estimular a las mujeres vietnamitas a desempeñar mayores papeles en la sociedad. Por otro lado, propuso que los dos países exploten al máximo sus potencialidades de cooperación, especialmente mediante el Tratado de Asociación Transpacífico (TPP) y exteriorizó la disposición de Washington de ayudar a Hanoi en el cumplimiento de los estándares trazados por este acuerdo de libre comercio de nueva generación.
En su discurso, Obama también ratificó que todas las naciones tienen su propia soberanía, y la soberanía y la integridad de cualquier país, sea pequeño o grande, deben ser garantizadas. Las potencias no pueden intimidar a países más débiles, todas las disputas deben ser resueltas por medios pacíficos, y los mecanismos regionales como la ASEAN deben ser fortalecidos, según Obama.
En conclusión, manifestó su optimismo sobre las relaciones entre Vietnam y Estados Unidos, así como su confianza de que las generaciones jóvenes del país indochino están listas a confirmarse a sí mismas ante el mundo. Estados Unidos es siempre un socio, un amigo de ustedes los jóvenes, ratificó. – VNA