Las primeras impresiones al llegar a Vietnam fueron los logros alcanzados por este hermano país tras las devastaciones de la guerra y los grandes sentimientos hacia el pueblo cubano.

Así escribió la periodista Karina Marron Gonzalez en un extenso artículo publicado en Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, sobre su recién viaje a Vietnam.

Bajo el título “Un amigo al otro lado del planeta”, Marron Gonzalez describió a Vietnam como una nación en pujante desarrollo con grandes y modernos edificios a lo largo de la autopista que unen la terminal aérea y el centro de la ciudad.

A pesar de que las motos son las reinas del tránsito, se puede apreciar automóviles de diferentes marcas, casi todos ensamblados en el país, que circulan por las calles, reseñó el texto.

Afirmó que los cambios positivos en Vietnam se deben a la renovación implementada desde 1986 y que han desembocado en la economía de mercado con orientación socialista que los vietnamitas defienden como su modelo económico.

Presentó también las experiencias vietnamitas en el desarrollo de la economía multicomponentes, donde conviven las entidades estatales, cooperativas, negocios privados, empresas mixtas y corporaciones de acciones con participación del Estado.

Crear condiciones de trabajo y el empleo de una parte considerable de las ganancias para remunerar a los trabajadores, recapitalizar las empresas y gestionar la superación de sus recursos humanos, fueron puntos de coincidencia en las gestiones de estos lugares tan diversos, subrayó.

Por otra parte, la autora refirió acerca de las inquietudes de los vietnamitas sobre la implementación de los Linea­mientos y las trans­formaciones en el modelo económico cubano y al mismo tiempo aseguró que el pueblo vietnamita agradece siempre por el apoyo y la solidaridad durante la guerra porque Cuba estuvo dispuesta a dar hasta su propia sangre.

Una semana no es suficiente para conocer un país, pero graba en la memoria las claves que permiten poco a poco comprenderlo. Del otro lado del mundo hay una tierra que tiene todavía muchos retos, al igual que la cubana, pero lo más importante es que en esos senderos Cuba y Vietnam continúan de la mano, concluyó. – VNA