Dijo que las fuerzas de inteligencia yseguridad de Tailandia tenían que intensificar sus actividades para prevenirataques similares.
Según Udomdej Sitabutr, las autoridadestailandesas han estado en alerta máxima desde la semana pasada debido a lainformación del retorno de militantes del EI al país desde Malasia.
Mientras tanto, un portavoz del Comando deOperaciones de Seguridad Interna reveló que el ataque estaba destinado a provocarmúltiples muertes.
El atentado tuvo lugar en el supermercadoBig C en el centro comercial de Pattani el martes y dejó un saldo de 59personas heridas. La primera explosión ocurrió en la entrada del edificio,mientras que la segunda bomba, que estalló unos 10 minutos más tarde, fuecolocada en un camión estacionado cerca.
Ningún grupo armado o persona se haatribuido la autoría de los dos ataques en un principio, mientras que lapolicía tailandesa sospecha de insurgentes en la región del sur.
La policía de Pattani declaró que el agresorhabía huido antes de las explosiones.
La región sureña de Tailandia, de mayoríamusulmana en un país predominantemente budista, es el teatro de operaciones deuna insurgencia nacionalista de corte islámico, y los atentados y emboscadas alas fuerzas de seguridad son frecuentes. Este enfrentamiento ha provocado másde seis mil 800 muertos desde 2004, según el grupo Deep South Watch, quemonitoriza el conflicto. – VNA