El Gobierno interino de Tailandia se establecerá antes del inicio del año fiscal 2015 en octubre, mientras tanto las elecciones generales podrían realizarse después de al menos de 15 meses, afirmó el presidente del Consejo Nacional para la Paz y el Orden, general Prayuth Chan-ocha.

En su primer discurso televisivo tras el golpe de estado el pasado 22, Prayuth Chan-ocha afirmó que ese acto propuso poner fin a la violencia y restablecer la paz en el país, con 67 millones de pobladores.

Tras cumplir sus tareas, el ejército tailandés volverá a sus tareas normales, remarcó.

Según citó el diario Bangkok Post, Prayuth Chan-ocha presentó una agenda para las reformas nacionales antes de las elecciones.

En la primera fase, de dos o tres meses de duración, se centrará en garantizar la seguridad y la reconciliación, precisó.

Durante la segunda fase, se espera que expertos elaboren una constitución temporal en el lapso de un año. Después se creará una asamblea nacional y se elegirá un primer ministro .

Además el jefe de la junta militar exhortó a todas las partes concernidas poner fin al uso de la fuerza y realizar diálogos para resolver las divergencias para buscar manera de salir de la crisis política nacional.

Al reaccionar ante la declaración del representante militar, Estados Unidos – alianza tradicional de Tailandia – estimó que la agenda de 15 meses es demasiado tiempo.

La portavoz del Departamento de Estado Jen Psaki, destacó que la mejor medida es que la administración militar de Tailandia organice rápidamente las elecciones generales y facilite ese proceso de manera integral y transparente.

Por su parte, la ministra australiana de Relaciones Exteriores, Julie Bishop, manifestó la preocupación ante las acciones militares en Tailandia y destacó que Canberra limitará su colaboración con el ejército tailandés y el nivel de interacción con sus líderes, además de revisar las actividades de cooperación en la defensa y en otras esferas.

Australia, que tiene las relaciones diplomáticas con Bangkok durante más de 60 años, declaró la cancelación de tres actividades militares bilaterales y aplicación de mecanismos para prevenir la emigración al país de los autores del golpe de estado.

Con anterioridad, Estados Unidos suspendió una maniobra militar con Tailandia y diversas visitas programadas de sus funcionarios a Bangkok. –VNA