Vietnam ha movilizado todo su sistema político y social a participar en las actividades preventivas víspera de la llegada del supertifón Haiyan, prevista azotar las provincias centrales mañana con vientos de hasta 183 kilómetros por hora.

A las 13:00 hora local (6:00 GMT), el ojo de la tormenta se ubicó a los 13,5 grados de latitud Norte y 114,8 de longitud Este, a 240 kilómetros del norte de la isla Song Tu Tay, en el archipiélago vietnamita de Truong Sa (Spratlys), con ráfagas de hasta 221 kilómetros por hora, informó hoy el Centro de Pronóstico Hidro-Meteorológico,

En las próximas 24 horas, la tormenta se moverá hacia el Noroeste, con una velocidad de 35 kilómetros por hora. Su epicentro se situará a los 16,7 grados de latitud Norte y 108,3 grados de longitud Este, en el mar de las provincias de Quang Binh y Quang Ngai, con vientos de 134 a 166 kilómetros por hora.

Se prevé que Haiyan, el décimo cuarto de la temporada de ciclón en el Mar Oriental, tocará la tierra vietnamita el lunes en las localidades centrales con rumbo hacia el Norte, para convertirse luego en una depresión tropical.

Por los impactos del huracán, se pronosticaron que en localidades centrales del país se registrarán hoy por la noche y mañana vientos fuertes y lluvias intensas.

Para minimizar las pérdidas humanas y materiales, el viceprimer ministro Nguyen Xuan Phuc se encuentra en la provincia de Quang Ngai para dirigir las medidas preventivas al devastador huracán, considerado uno de los ciclones tropicales más potentes en la historia.

Las refinerías Binh Son y Dung Quat, en esta localidad, continúan las prevenciones tales como la desinstalación de los apartados que podrían derrumbar por los fuertes vientos. Todos sus ejecutivos y obreros fueron movilizados antes de la llegada del desastre natural.

Los residentes de las áreas de riesgos fueron evacuados, mientras que los pesqueros y embarcaciones fueron obligados a buscar sitios seguros. El sistema de diques, tanto marítimos como fluviales, fue consolidado con sacos de rocas y arena.

Agua potable, medicinas y otros productos alimentarios esenciales fueron preparados para caso de emergencia en las provincias centrales.

Xuan Phuc ordenó también a las autoridades locales y los pobladores a mantenerse alerta, movilizar fuerzas y equipos de rescate e informar de forma oportuna sobre la evolución de la tormenta.

Mientras tanto, en las provincias de Quang Tri y Nghe An, se intensifican los similares trabajos preventivos, tales como la suspensión de las clases en esta misma jornada y la atención especial de los embalses que ya están llenos de agua debida por las lluvias en los últimos días, consecuencias de los continuos ciclones.

Decenas de miles de embarcaciones ya se encontraron en lugares seguros, según las autoridades.

La cancillería emitió notas diplomáticas a los gobiernos de Malasia, Indonesia, China y Filipinas para pedir ayudas necesarias para que los barcos y pesqueros vietnamitas se queden en las áreas seguras en sus territorios en caso de que no pueden llegar a la costa nacional.

Además, la cartera orientó a las embajadas vietnamitas en esos países seguir de cerca la situación para poder coordinar en caso de socorro a favor de sus pesqueros.

A su paso por Filipinas ayer, con vientos sostenidos de 315 kilómetros por hora, Haiyan dejó al menos 100 muertos y cerca de un millón de personas afectadas.-VNA