El presidente Truong Tan Sang y el primer ministro Nguyen Tan Dung enviaron este jueves condolencias al mandatario filipino, Benigno A. Aquino III, por las severas pérdidas causadas por el reciente ciclón Bopha.

En la misma jornada, el canciller Pham Binh Minh también expidió su compasión a su homólogo Albert F. Del Rosario.

El huracán Bopha, el sexto y el mayor de la actual temporada de Filipinas, arrasó el último martes a la región sureña de ese país y dejó un saldo de 477 muertos, 380 desaparecidos y 250 mil damnificados, de acuerdo con las últimas estadísticas.

Las autoridades filipinas aceleran los trabajos de rescate para minimizar las consecuencias de la tormenta, a la vez que aseguran alimentos y medicamentos para la población de las zonas costeras orientales de la isla Mindanao, donde unas 150 mil personas aún quedan aisladas por la destrucción de las infraestructuras de comunicación.

La comunidad internacional ofreció inmediatamente su solidaridad con Manila a través del envío de brigadas voluntarias de socorro y rescate, así como asistencias materiales, incluido un paquete financiero de cerca de cinco millones de dólares de la organización de la Cruz Roja y la Media Luna Roja. –VNA