Hanoi (VNA)- Vietnam no pudo lograr el título continental en categoría sub-23 tras perder 1-2 ante Uzbekistán en la final del Campeonato Asiático, pero ha hecho historia por su fantástica actuación general.
Esta tarde, la naturaleza se encargó de darle un colorido especial al partido final que se llevó a cabo en el estadio de Changzhou, en la homónima ciudad china. La nieve cubrió por completo el campo de juego en la que los jugadores de ambos equipos tuvieron que disputar pese a las condiciones adversas en el terreno.
A pesar del agudo frío y las intensas nieves, el partido se calentó desde los primeros minutos, y los uzbekos se adelantaron en el minuto 8 gracias a un cabezazo del defensor Ashumatov desde un lanzamiento de córner.
No obstante, Quang Hai igualó para el conjunto vietnamita en el minuto 41 con un gol del tiro libre tras una falta de los defensores rivales. El centrocampista dibujó una curva con el balón que resultó imparable para el portero uzbeco.
Debido a las intensas nieves, la segunda mitad del partido se retrasó 45 minutos y los uzbekos saltaron al césped con una nueva camisa, de color azul en lugar del color blanco puesto en el primer tiempo.
Aprovecharon el cansancio físico de los jugadores vietnamitas que tuvieron que pasar los partidos de cuartos de final y semifinales en los penales, los uzbekos presionaron, dominaron el campo y crearon varias ocasiones de gol. No obstante, los dos equipos se fueron al vestuario con un resultado 1-1 después de 90 minutos del tiempo reglamentario.
La defensa vietnamita se mantuvo firme y disciplina hasta el minuto 119 de la prórroga cuando Sidikov anotó el decisivo gol del partido para regalar el campeonato a Uzbekistán y hacer llorar a millones de hinchas vietnamitas.
Aunque no lograron cerrar con broche de oro de una campaña magnífica en este torneo, los jugadores vietnamitas se han convertido en los verdaderos campeones en el corazón de millones de fanáticos del país indochino.-VNA