Un portavoz de la canciller canadiense, Chrystia Freeland, informó que Ottawapropuso a Filipinas el traslado de los residuos a Canadá para destruirlos, yestá esperando la respuesta de Manila, señala la agencia Canadian Press.
Con anterioridad, el 23 de abril el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte,dijo que "declararía la guerra" a Canadá si no retira ciencontenedores de basura de Manila.
Esos recipientes de carga contienen desperdicios, incluidos pañales usados yresiduos de cocina, que sufrieron un proceso de descomposición durante los casiseis años que llevan depositados un puerto cercano a la capital filipina.
En 2016, un tribunal de Filipinas ordenó devolver esos residuos a Canadá, perohasta el momento ha resultado imposible ejecutar tal decisión.
Un abogado de la provincia de Columbia Británica presentó un escrito ante lostribunales denunciando que Canadá violó el Convenio de Basilea, el cualprohíbe que las naciones desarrolladas envíen sus desechos tóxicos o peligrososa las naciones en desarrollo sin un previo consentimiento de las mismas.
La semana pasada Sabrina Kim, secretaria de prensa del ministro de MedioAmbiente de Canadá, Catherine McKenna, afirmó que el gobierno de su país secompromete a trabajar con Filipinas para resolver este problema. – VNA