Según datos oficiales, desde agosto de 2017 el aumento de la violencia es lacausa por la cual 740 mil rohinyás cruzaron la frontera del estado myanmeno deRakáin, para huir a Bangladés.
Hasta la fecha, unos 900 mil myanmenos se encuentran en campos de refugiados enBangladés.
Con anterioridad, el 20 de agosto pasado, el Alto Comisionado de las NacionesUnidas para los Refugiados (ACNUR) y las autoridades bangladesíes realizaron consultascon más de tres mil rohinyás para valorar el posible regreso de los mismos a supaís, pero muchos rechazaron la repatriación por temer la violencia.
De acuerdo con el Programa Mundial de Alimentos (PMA), un 80 por ciento de losrohinyás en Bangladés dependen totalmente de la ayuda de esa entidad. Elorganismo de la ONU destina unos 24 millones de dólares mensuales para laalimentación de casi 900 mil refugiados. /.