El gobierno cambodiano suspendió esa medida establecida temporalmenteel 4 de enero a raíz de las huelgas de los trabajadores del sector deconfecciones que desataron violencia con un saldo de cinco muertos yunos 40 heridos.
La reivindicación laboral pormejores salarios confluyó con la de la oposición, que organizó variasmarchas multitudinarias para denunciar el supuesto fraude en laselecciones de julio y exigir la celebración de nuevos comicios.
Con anterioridad, en la inauguración de una planta termoeléctrica enla ciudad portuaria de Sihanouk, Hun Sen dijo que tanto los partidariosde la oposición como los simpatizantes del gobierno tienen derecho deorganizar manifestaciones.
También reiteró en la ocasión que no convocará nuevas elecciones.
Las diferencias entre el Partido del Pueblo de Cambodia (PPC) y laoposición de Salvación Nacional (CNRP) surgieron después de laslegislativas en julio pasado con el triunfo de la agrupación gobernante,al obtener 68 escaños, mientras que su opositor solo alcanzó 55 puestosen la Asamblea Nacional.
Sin embargo, el CNRP rechazó este resultado, boicoteó el nuevoparlamento y organizó varias manifestaciones para reclamar otravotación.
Los grupos de trabajo de estas dosfuerzas políticas se reunieron dos veces en septiembre pasado pararesolver sus controversias políticas, pero no lograron ningún acuerdo. –VNA