Según latradición milenaria, los profesores confucionistas, también conocidocomo Ong Do, ofrecen obras de caligrafía en caracteres chinos yvietnamitas para que la gente compre y adorne sus hogares o como regalo,invocando salud, felicidad y prosperidad para el nuevo año. Estacostumbre milenaria muestra además la gran consideración a losestudios.
“Cuando nos decidimos estrenar laesquina para conversar el arte caligráfica hace 8 años, no pensamos queesta labor va a ser tan popular entre los residentes locales. Decenas demiles de visitantes pasean por la calle cada año”, dijo Le Lan,director del Club de Calígrafos.
Desde las horastempranas de la mañana, la esquina está llena de calígrafos, académicos yvisitantes. En los días de la fiesta del Tet, los Ong Do suelen regalarlas letras caligráficas a visitantes. Para los vietnamitas , pedirla caligrafía en los primeros días del año atrae la buena suertepara sí mismo y para sus familias en los 12 meses siguientes.
Un caballo al galope, animal simbólico del año siguiente,se refleja en diferentes materiales, con la esperanza de traer buenasuerte para el Nuevo Año.
“Todas son realizadas con pincel ytinta negra. Se trata de una labor de suma dedicación para poderobtener una preciosa obra artística. Se debe preparar primero lapresentación en el papel y luego se realiza la escritura”, según NguyenQuy Son, Ong Do del Club de Calígrafos.
El ambientefestivo en esta esquina demuestra que bellas costumbres del Año NuevoLunar todavía son fuertes aun cuando la ciudad se desarrolla a un ritmodel rugido.-VNA