Según el funcionario, las políticas a favor del crecimiento, junto con elestímulo al desarrollo del sector privado, son la clave para la recuperacióneconómica.
Malasia debe continuar aplicando las medidas de salud pública para prevenir elrebrote del COVID-19, dijo y reiteró la necesidad de apoyar a las familiasvulnerables y a las empresas, sobre todo las pequeñas y medianas, además deelaborar programas de reforma a mediano plazo.
Con anterioridad, en abril pasado, el BM rebajó su pronóstico del ProductoInterno Bruto de Malasia a -0,1 por ciento de un 4,5 por ciento estimadoinicialmente, debido al brote del COVID-19.
Tras dos meses de ser paralizadas, las actividades de producción y negocios enel país del Sudeste Asiático se están recuperando, mientras las restriccionesse han flexibilizado. La mayoría de las empresas reanudaron sus operaciones yse permite realizar viajes domésticos.
Hasta la fecha, Malasia lanzó tres paquetes de estímulo económico por un valorde 70 mil millones de dólares./.