Cuando visitó laisla por primera vez, el teniente Tran Binh Phuc vio a niños iletrados, cuyospadres estaban tan ocupados que no podían educar a sus hijos, y ese hecho lepreocupó.
El oficial luego solicitóa su superior en la estación de guardia fronteriza número 704 a abrir una clasey desde entonces no acabó su iniciativa. Actualmente, tiene a 19 alumnos de clases comprendidasdel primer al sexto grado. De ellos dos tiene discapacidades.
El teniente,quien entiende a sus estudiantes como si fueran sus propios hijos, contó conorgullo sobre Dau Yen Nhi, una niña de ocho años de edad nacida con el síndromeDown: “Ella hablaba muy poco y solamente podía controlar básicamente sucomportamiento cuando su madre la llevó a mi clase. Ahora es capaz de leer,escribir y comportarse con corteza.”
Antes de buscarla enseñanza superior en la tierra firme, los jóvenes locales adquieren conocimientosde Phuc en un aula pequeña sin luz eléctrica. Haciendo un gesto hacia unalibrería de aluminio en la esquina del aula, el militar dijo que puede es nadaespecial en la tierra firme, pero aquí es extremadamente valiosa.
Tenemos buenasuerte al recibir bolígrafos, ropas y libros de varias localidades, dijo.
Mantengo estasclases por el futuro de los niños, expresó.
Hon Chuoi seubica a 17 millas náuticas al Oeste de la provincia de Ca Mau. – VNA