En un seminario temático “Seguridadmarítima en Asia Oriental”, organizado ayer por el Instituto deRelaciones Internacionales de Noruega (NUPI), los ponentes abordaron losdesafíos de seguridad, concretamente los riesgos de enfrentamiento enel Mar de China Oriental y el Mar Oriental y la necesidad de construirla confianza y fortalecer cooperación en el sector en Asia-Pacífico.
En la cita, un representante de la Embajada de Vietnam actualizó lasituación en la región y reiteró la posición de su país sobre lainstalación ilícita por China del ingenio perforador Haiyang-Shiyou-981en la zona económica exclusiva y la plataforma continental vietnamita.
Acerca del asunto, los analistas abordaron losactos descarados de Beijing en el lugar y analizaron sus impactosposibles en la seguridad y la estabilidad en Este de Asia.
También exhortaron a China a respetar el derecho internacional yafirmaron que la llamada “línea de nueve tramos”, que Beijing establecióunilateralmente para apropiarse casi toda esa zona marítima, falta defundamentos y es inválida en las negociaciones.
Pidieron a China y las partes concernientes a adoptar mecanismosefectivos para contener la posibilidad de conflictos, realizarconversaciones y resolver las diputas mediante negociaciones, comocontribución a la paz, estabilidad y seguridad en la región.
La verdad histórica es que China inició su conquista ilegal de laparte occidental del archipiélago vietnamita de Hoang Sa en 1956 y en1974, invadió con fuerza a las islas orientales de ese territorio.
Con la misma política violenta, Beijing lanzó en el 14 de marzo de1988 un ataque militar y ocupó varias islas del archipiélago vietnamitade Truong Sa.
China estableció arbitrariamenteuna línea de base ambigua (conocida como de “nueve tramos”, en “forma deU” o en “forma de lengua”) que comprende el 80 por ciento de lasuperficie del Mar Oriental, lo cual va totalmente en contra de laConvención de la ONU sobre el Derecho en el Mar (UNCLOS) de 1982 y violala soberanía marítima de países vecinos.
Comoparte de esa estrategia ambiciosa e infundada, Beijing busca crear“zonas de disputa” imaginarias en aguas totalmente jurisdiccionales deotras naciones, para imponer luego su política superficialmente pacíficade “ceder los litigios para explotar juntos”.
Vietnam dispone de suficientes evidencias históricas y bases jurídicaspara declarar su soberanía sobre esos dos archipiélagos en el MarOriental, y los reinos feudales del país indochino ejercieron, por lomenos, desde el siglo XVII su jurisdicción en ambos territorios de formaconstante y pacífica. – VNA