El culto procede de una antigua leyenda que cuenta el día 23 del último mes lunar, estos dioses van al paraíso a rendirle cuenta al Emperador de Jade sobre la situación de cada familia. Foto: En el pueblo Thuy Tram, en la provincia norteña de Phu Tho, se cultivan carpas amarillas y rojas para vender el 23 de diciembre lunar. (Fuente: VNA)
Durante esta tradición, son depositadas en esas aguas carpas amarillas y rojas, las cuales, según la creencia popular, ayudarán a Ong Cong y Ong Tao a llegar al paraíso. Foto: En el pueblo Thuy Tram, en la provincia norteña de Phu Tho, se cultivan carpas amarrillas y rojas para vender el 23 de diciembre lunar. (Fuente: VNA)
El fuego de la cocina simboliza la reunión familiar, abundante cosecha y desarrollo agrícola. Por eso, esta costumbre muestra las aspiraciones a la felicidad y prosperidad ante la llegada del Nuevo Año Lunar, también llamado Tet. Foto: En el pueblo Thuy Tram, en la provincia norteña de Phu Tho, se cultivan carpas amarrillas y rojas para vender el 23 de diciembre lunar. (Fuente: VNA)
Cada fin de año, Ong Cong y Ong Tao regresan a la Tierra y en la medianoche del último día todos los problemas quedan atrás ya que los tres espíritus que los simbolizan han convencido al Emperador de Jade de que no vale la pena pasar las tristezas al nuevo calendario. Foto: En el pueblo Thuy Tram, en la provincia norteña de Phu Tho, se cultivan carpas amarrillas y rojas para vender el 23 de diciembre lunar. (Fuente: VNA)
El fuego de la cocina simboliza la reunión familiar, abundante cosecha y desarrollo agrícola, de ahí que esta costumbre muestre las aspiraciones de felicidad, paz y prosperidad ante la llegada del Tet. Foto: En el pueblo Thuy Tram, en la provincia norteña de Phu Tho, se cultivan carpas amarrillas y rojas para vender el 23 de diciembre lunar. (Fuente: VNA)
Por tan significativo acontecimiento, todos los hogares vietnamitas están ocupados preparando platos típicos y bebidas en ofrenda a esas deidades guardianas de la cocina. Se elaboran de manera cuidadosa las ofrendas, se queman ropas hechas de papel, de color rojo (símbolo de la buena suerte y la prosperidad), incluidos sombreros, mantos y calzados para rendir culto a esas divinidades (dos masculinas y una femenina), que son las que protegen a todas las familias en las cocinas de las casas. Foto: Hacen las compras preparatorias del rito dedicado a dioses de cocina (Fuente: VNA)