En una rueda de prensa efectuada ayer, el portavoz de lapresidencia, Ernesto Abella, destacó que la demanda de uno de los cabecillas dela banda extremista, Abdulá Maute, para liberar a 150 rehenes en ocasión de lafiesta musulmana de Eid-Al-Fitr no fue aceptada por el gobierno.
Subrayó que Filipinas castigará a los terroristas, quienescausan inestabilidad en la región sureña del país, lo que originó la evacuaciónobligada de más de 200 mil habitantes locales.
Informó Abella que un total de 387 personas perdieron la vidapor los enfrentamientos entre el ejército filipino y las fuerzas rebeldes.
Afirmó que el ejército está esforzándose para liberar a Marawiy a los rehenes.
Los conflictos se iniciaron el 23 de mayo cuando losrebeldes atacaron a la ciudad de Marawi con armas pesadas. Posteriormente, elpresidente Rodrigo Duterte declaró la ley marcial en toda la isla de Mindanao,donde se ubica tal urbe. – VNA