Numerosas reliquias de Hanoi proceden de cuando Thang Long (su nombre antiguo) fue el centro ceremonial, político y de todas las importantes decisiones de nivel nacional del Vietnam feudal de los siglos XI al XVIII.

En el otoño de 1010, el rey Ly Cong Uan dictó el decreto real que trasladó la sede del gobierno de Hoa Lu, en la actual provincia de Ninh Binh, a Thang Long, un amplio y plano terreno situado en una curva del río Rojo.

La Ciudad Imperial incluyó tres círculos de murallas. El primero marcó el territorio de la capital y tuvo como función la protección de todos los ciudadanos.

El área interior del segundo círculo fue la sede de la Corte Real, en donde celebraban sus sesiones periódicas y otras actividades oficiales. Las últimas murallas cercaron la Ciudad Prohibida, casa del emperador y su familia.

Las construcciones más importantes de la antigua Thang Long se ubicaron a lo largo del eje principal Norte–Sur de la ciudadela y combinaron de forma perfecta con un amplio sistema de pozos, lagos y árboles.

Tal combinación tuvo una doble función estética y acondicionadora del clima interno de esta zona real.

En el punto sureño de la Ciudad está el portal Doan Mon, escena de incontables desfiles militares, ceremonias de designación de mandarines y exámenes confucionistas.

La primera planta de Doan Mon incluye cinco puertas ovales de piedras angulares y las restantes dos se construyeron con ladrillos finos y maderas, cubiertas por tejas de tubo. Como pórtico principal de la ciudadela, era el punto de partida del rey y sus comitivas en todos los viajes oficiales.

El centro de la Ciudad Imperial, tanto geográfica como políticamente, era el palacio de Kinh Thien, cuyos vestigios están casi intactos, incluido su extenso piso hecho de piedra y escalones adornados con esculturas del dragón, símbolo del poder supremo.
Los dragones monolíticos, de tres metros y 40 centímetros cada uno y con dibujos a relieve en sus alrededores, tienen el cuerpo ondeado y cubierto parcialmente por las nubes, en una representación de la majestuosidad de los reyes.

Otro complejo importante de la Ciudad Prohibida lo constituye el Palacio de las Reinas, denominado Truong Lac o felicidad eterna, que a pesar de su ruina por el tiempo y trágicos hechos históricos acaecidos, deja ver algunas reliquias que ofrecen ideas sobre su grandeza y minuciosa construcción.

Un rasgo distintivo de estos objetos es el predominio de la imagen del ave fénix, que simboliza la inteligencia y felicidad, en vez de la del dragón como en otras obras relacionadas con la realeza.



Las reliquias de Thang Long es otra ratificación de los valores de la milenaria Hanoi, la capital de Vietnam en el pasado, el presente y el futuro.- VNA