Un patrullero naval de Indonesia encontró un gran pertrecho que podría ser la cola del avión de pasajeros de AirAsia que cayó en el Mar de Java, informó Yayan Sofyan, un oficial de la marina indonesa.

Se trata de la sección donde se encuentran las cajas negras del vuelo QZ8501, cuyo descubrimiento podría abrir una brecha en los esfuerzos internacionales para aclarar las causas del accidente aéreo ocurrido el 28 de diciembre.

No está claro si se refería a uno de los cinco grandes objetos flotantes encontrados por buques de rastreo el último fin de semana.

El jefe de la Agencia Nacional de Búsqueda y Rescate (Basarnas) de Indonesia, Marshall Bambang Soelistyo, dijo que su entidad está verificando la información.

Hasta ahora han sido recuperados treinta y siete cadáveres de los pasajeros y la tripulación, algunos sujetados a sus asientos. Muchos más pueden seguir atrapados en el cuerpo de la aeronave.

Unos 260 agentes sanitarios de Indonesia y otros países están en coordinación para acelerar el proceso de identificación de las víctimas a través de exámenes de huellas y DNA. Cinco especialistas forenses australianos llegaron hoy a Indonesia para ayudar en este proceso. Canberra expresó su disposición de enviar más expertos si es necesario.

El Comandante en Jefe del Ejército Nacional de Indonesia, general Moeldoko, sugirió establecer una página web con el objetivo de proporcionar informaciones necesarias sobre el vuelo QZ8501, el accidente y las más recientes noticias de búsqueda, así como otros intereses de parientes de las víctimas.

Moeldoko dio la propuesta ayer durante su visita al centro de crisis en Surabaya, tras anunciar que el Ejército de Indonesia crea condiciones para que familiares de los desafortunados llegaron a la villa de Pangkalan Bun, provincia central de Kalimantan, zona del hallazgo.

Afirmó que se mantendrán las fuerzas participantes en las indagaciones acerca del avión desaparecido según la coordinación de Basarnas.

El avión con número de vuelo de QZ 8501 despegó el 28 de diciembre de Surabaya, Indonesia con destino a Singapur, donde tenía previsto aterrizar unas dos horas después.

A bordo de la aeronave viajaban 155 pasajeros y una tripulación de siete personas, entre ellos 155 indonesios, tres surcoreanos, un británico, un francés (copiloto), un malasio y un singapurense.

El piloto solicitó a la torre de control en Indonesia girar ligeramente a la izquierda y aumentar altura para evitar una tormenta antes de que se cortara la comunicación a las 06:17 (hora local).

El aparato de la aerolínea de bajo costo AirAsia no emitió ninguna señal de socorro. – VNA