Después de esos días feriados, los visitantes tendrán oportunidadde disfrutar el Canto Xoan en el horario comprendido entre las 14:00 y 16:00 (horalocal) en la casa comunal de Hung Lo, y de 14:00 a 16:00 todos los sábados y domingosen Lai Len.
Este miércoles se inauguró un recorrido diario que uneHanoi y Phu Tho, con el objetivo de difundir los productos turísticos y las imágeneslocales.
En un futuro cercano, las agencias de viajes incluiránen los planes turísticos el canto Xoan y los rituales de culto de los ReyesHung, reconocidos por la UNESCO como Patrimonios Culturales Inmateriales de la Humanidad.
El Canto Xoan de la provincia Phu Tho es una expresiónmusical con una historia de más dos mil años, interpretada tradicionalmente enlugares sagrados, como templos y santuarios, y en los ayuntamientos durante losdos primeros meses del calendario lunar en Phu Tho, conocida como tierrasagrada de los Reyes Hung, fundadores de la nación.
Ese arte folclórico encierra diversas creencias tradicionales como cultos a losantecesores, los patrones del pueblo y los héroes nacionales y es presentadoactualmente en 17 fiestas populares en Phu Tho.
Hay tres clases de Xoan: los cantos sacros para rendir culto a los reyes Hung,y los espíritus protectores de las aldeas; los cantos rituales para impetrarcosechas abundantes, buena salud y suerte, y los cantos para las fiestasaldeanas.
Además de canciones, comprende danzas y músicas detambores.
El canto fue inscrito en la Lista del PatrimonioCultural Inmaterial que requiere medidas urgentes de salvaguardia en 2011, añoque se registró sólo 100 artistas que interpreten este tipo de arte. Esta cifrallegó hoy día a más de mil 557 participantes en 33 clubes.
El arte escénico se transfirió a la Lista Representativadel Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad en diciembre de 2017 enreconocimiento a los esfuerzos de las comunidades locales y las autoridadesnacionales para reforzar la viabilidad del canto de Xoan.
Todos los vietnamitas conocen la leyenda de hace cuatro mil años sobre la unión nupcial entre Lac Long Quan y Au Co, que dio a luz cien hijos. A fin de ampliar el territorio, él avanzó con 50 pequeños hacia el mar y ella se estableció en las montañas con el resto.
El hijo mayor, que iba con su madre, se quedó en Phong Chau (actual provincia de Phu Tho), fundó el Estado independiente bajo el nombre de Van Lang y adoptó el título real de Vua Hung (rey Hung), una tradición que siguieron sus 18 sucesores.
Aquel período de los 18 reyes Hung se caracterizó por el próspero desarrollo agrícola y resonantes victorias sobre los agresores foráneos. Los monarcas eligieron a la cima Nghia Linh, la más alta en la región para rezar a los genios del arroz y del sol por buen clima, abundantes cosechas y paz para todo el pueblo.
Para enaltecer sus méritos, los vietnamitas celebran el 10 de marzo del calendario lunar una ceremonia para rendir tributo a los reyes en el Templo que lleva su nombre en Phu Tho.
La zona de reliquias del Templo Hung se extiende desde la base hasta el pico Nghia Linh, con una altura de 175 metros, que alberga los templos Ha, Trung, Thuong y Gieng.
La leyenda cuenta que Au Co dio a luz en el Templo Ha, mientras el Trung fue el lugar donde los monarcas y sus generales se reunieron para tratar temas importantes del país.
Los rituales reales de oraciones tuvieron lugar en el Templo Thuong y el Gieng fue el sitio de descanso de las dos princesas del último emperador Hung cuando acompañaron a su padre en los viajes.
A pesar de los altibajos de la historia, el credo de los reyes Hung sigue manteniendo su vitalidad. Asistir al festival es como regresar al reencuentro con sus ancestros, una creencia arraigada en el subconsciente de los vietnamitas, estén donde estén.
En diciembre de 2012, el ritual que homenajea a los creadores de la nación vietnamita fue declarado por la UNESCO como herencia mundial. Se trata de la primera vez que esa institución reconoce un culto a los ancestros como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.
La fecha del 10 de marzo lunar se ha convertido hoy día una auténtica fiesta nacional en este país indochino y atrae cada año a miles de peregrinos al Templo de los reyes Hung en Phu Tho, a unos 100 kilómetros de la capital Hanoi. –VNA
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