Tal orientaciónse produjo durante una reunión en línea sobre la mitigación de las secuelas de inundacionesen la región central de país, las cuales dejaron como saldo, del 12 al 16 deeste mes, 10 muertos y cinco desparecidos, más de 112 mil viviendas destruidas,más de 10 mil hectáreas de cultivo azotadas y numerosas pérdidas deinfraestructuras.
Tras enviar sus condolenciascon las familias de las víctimas y su simpatía con las pérdidas de las localidades,el jefe del gobierno pidió a los ministerios, agencias y poderes localesconcernientes movilizar todos los recursos para garantizar la máxima seguridadpara los habitantes, minimizar las pérdidas materiales y humanas y abastecer dealimentos y otros medios vitales a los damnificados.
También instruyóa seguir de cerca la situación del tiempo, para disponer de medidas preventivas,buscar y rescatar a aquellos que permanecen desaparecidos, evacuar a lospobladores de las zonas peligrosas y asignar a unidades de vigilancia en lasáreas y vías inundadas.
Una vez terminadaslas inundaciones, las autoridades deberán estar listas para reconstruir lasobras destruidas y realizar medidas de saneamiento y salud preventiva; mientraslos medios de comunicación incrementarán la información a la población para fortalecerla prevención de los impactos, indicó.
A largo plazo, hayque evaluar integralmente la situación y los riesgos de inundaciones en elCentro y la Altiplanicie Occidental, para adoptar medidas apropiadas, orientó.– VNA