El Primer Ministro Nguyen Tan Dung exigió hoy la garantía absoluta de la seguridad para las personas y empresas, especialmente las de capitales extranjeros.

En su mensaje oficial enviado hoy al Ministerio de Seguridad Pública, las autoridades de las provincias y ciudades y los órganos centrales, Tan Dung subrayó que las muestras del patriotismo y condena a los actos ilícitos de China en la zona económica exclusiva de Vietnam en el Mar Oriental son acciones legítimas.

Sin embargo, hay personas que aprovecharon la situación para realizar actividades ilegales, sabotearon plantas manufactureras, incluidas las foráneas, provocaron desorden social y afectaron la producción, la vida cotidiana de la población, el ambiente de inversiones y las políticas hacia el exterior del Partido Comunista y Estado, señaló.

El jefe del gobierno ordenó la realización simultánea de medidas para prevenir acciones contrarias a las leyes nacionales y apoyar a las empresas afectadas a restabilizarse y reorganizar sus actividades normales.

Exigió realizar una labor de propaganda para unir al pueblo y garantizar así la seguridad, ayudarse mutuamente para desarrollar la producción, mejorar la vida y contribuir a la protección de la soberanía sagrada nacional, en conformidad con las leyes internacionales.

Demandó una explicación clara a las misiones diplomáticas y los inversores foráneos sobre las orientaciones y políticas del Partido Comunista y Estado.

Ratificó que Vietnam se empeña en crear condiciones favorables y garantizar la seguridad absoluta para las personas, empresas y agencias extranjeras en el país, en coherencia con las leyes y acuerdos internacionales.

La Corporación Nacional de Petróleo Submarino de China instaló desde el 2 de mayo la plataforma petrolífera Haiyang Shiyou – 981 en una zona de 15 grados 29 minutos 58 segundos de latitud Norte y 111 grados 12 minutos 6 segundos de longitud Este, ubicada absolutamente en la zona económica exclusiva y la plataforma continental de Vietnam, a unas 120 millas náuticas de su costa.

El gobierno chino movilizó casi 90 barcos armados, incluidos militares para escoltar su plataforma y prohibió además ilegalmente a las embarcaciones de los otros países a navegar en la zona a tres millas náuticas de esa plataforma.

Esa acción unilateral de la parte china constituye una grave violación a la soberanía, los derechos jurisdiccionales de Vietnam, refrendados en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (UNCLOS) de 1982, y va en contra de las leyes internacionales y la Declaración de Conducta en el Mar Oriental entre la Asociación de Naciones del Sudeste de Asia y Beijing (DOC), firmada en 2002.

También amenaza directamente a las actividades marítimas y comerciales internacionales al dañar gravemente a la estabilidad en el Mar Oriental y en la región. – VNA