Tokio (VNA) – Los medios de comunicación japoneses han informado ampliamente sobre la visita del primer ministro japonés, Ishiba Shigeru, a Vietnam y Filipinas, destacando su deseo de fortalecer las relaciones con los países del sudeste asiático y reafirmar la importancia de mantener un sistema multilateral de libre comercio.
Según el periódico Mainichi, el 27 de abril, el primer ministro Ishiba llegó a Hanoi donde se reunió con el secretario general del Partido Comunista de Vietnam, To Lam, quien es considerado el líder supremo del país.
Por su parte, la televisión NHK reportó que, Ishiba expresó su interés en intercambiar puntos de vista sobre temas como el impacto de los aranceles estadounidenses en su encuentro con el primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, el 28 de abril. En respuesta a las tarifas impuestas por la administración de Donald Trump, el primer ministro japonés subrayó la importancia del sistema de libre comercio y reiteró su compromiso de cooperar para abordar los desafíos derivados de estas políticas, según el Mainichi.
Durante su estancia en Vietnam, Ishiba también tiene programada una visita a un parque industrial local donde operan diversas empresas japonesas. En este sentido, el jefe de Gobierno manifestó su intención de tomar todas las medidas necesarias para mitigar los efectos de los aranceles estadounidenses sobre las compañías japonesas que operan en el extranjero, informaron los medios.
Mientras tanto, la agencia de noticias Kyodo citó al premier Ishiba diciendo a los periodistas en la Oficina del Primer Ministro, antes de iniciar su gira, que el Sudeste Asiático ha experimentado un notable crecimiento económico y desempeña un papel crucial en la creación de un Indo-Pacífico libre y abierto. Ishiba recalcó su deseo de fortalecer la confianza personal y mejorar la cooperación de Japón con la región.

Kyodo también citó a un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores, quien afirmó que el gobierno japonés tiene la intención de consolidar su compromiso con el Sudeste Asiático, una región que considera “geopolíticamente importante” y un motor de crecimiento mundial, especialmente en un momento marcado por una “creciente incertidumbre” en los asuntos internacionales./.