El Consejo delAceite de Palma de Malasia (MPOC) atribuyó esa tendencia bajista al clima seco que limita el rendimiento y a las restricciones de movimientos en el país por el COVID-19.
Detalló que labaja aplicación de fertilizantes en 2019 y el tiempo seco provocaron la disminucióndel rendimiento de frutos de palma, además del cierre temporal de variasfábricas y plantaciones a causa de la epidemia, sobre todo en el estado de Sabah,el mayor productor de esta sustancia grasa en Malasia.
De acuerdo con estadísticas,el rendimiento de frutos durante el primer trimestre del presente año alcanzó 3,37toneladas por hectáreas, una merma de 21 por ciento en relación con el mismoperíodo de 2019.
En una entrevistaconcedida recientemente a la prensa, el director ejecutivo de MPOC, KalyanaSundram, dijo que la demanda de este aceite vegetal más utilizado en el mundopodría “tocar fondo” después de los impactos provocados por el COVID-19 y laposible recuperación lenta./.