Londres (VNA) – A lo largo de ocho décadas de independencia y construcción nacional, Vietnam ha transformado lo que parecía imposible en realidad, superando momentos decisivos y difíciles de su historia.
Así lo afirmó Clement Ngu, corresponsal de Nikkei Asia en el Reino Unido, en una entrevista reciente concedida a la Agencia Vietnamita de Noticias con motivo del 80º aniversario de la Independencia (2 de septiembre de 1945 - 2025).
El periodista citó como ejemplos la victoria en las guerras contra el colonialismo francés y el imperialismo estadounidense, los esfuerzos por sacar al país de la pobreza tras la guerra y los éxitos alcanzados en el ámbito internacional.
Destacó que desde la política de Renovación (Doi Moi) de 1986, el Producto Interno Bruto de Vietnam se ha multiplicado por 100, mientras que el ingreso per cápita pasó de menos de 700 dólares a casi 4.500 en 2023.

Vietnam también logró una reducción notable de la pobreza, del 58 % a inicios de los años 90 a menos del 5 % en 2020, y pasó de ser importador de alimentos a gran exportador agrícola gracias a la Resolución 10 sobre la reforma de la gestión agrícola.
Desde la década de 2000, la reestructuración de empresas estatales y el impulso al sector privado lo convirtieron en motor de empleo e innovación.
Según Clement, Vietnam ha mantenido un crecimiento económico constante durante las décadas de 1980, 1990, 2000, 2010 y 2020, y el Gobierno se propone un aumento del PIB superior al 8 % este año y de dos dígitos el próximo.
En materia de política exterior, subrayó la estrategia de amistad con todos los países y el papel activo de Vietnam en la paz internacional, recordando hitos como el restablecimiento de relaciones con Estados Unidos, la cumbre EE.UU.–Corea del Norte en Hanoi en 2019 y las recientes visitas de líderes de China, Rusia y EE.UU. en menos de un año.
El corresponsal consideró que estas realizaciones son fruto de una diplomacia multilateral que convierte la competencia entre grandes potencias en oportunidades para Vietnam.
Asimismo, resaltó la apertura de los dirigentes y del pueblo vietnamita al comercio, la inversión extranjera y el desarrollo del sector privado.
De cara al futuro, Clement valoró que el objetivo de convertirse en un país desarrollado y de ingresos altos para 2045 es ambicioso, pero alcanzable, gracias a la estabilidad política y la apuesta por sectores clave como los semiconductores y las finanzas internacionales, junto con reformas institucionales, innovación científica y tecnológica, e integración global./.